Un joven empleado de 25 años de la estación de servicio ubicada en Mendoza al 7600 fue la nueva víctima en esta oportunidad del ataque a ciudadanos inocentes que vive la ciudad. El hombre, de nombre Bruno Bussanich, fue ejecutado a balazos este sábado minutos antes de la medianoche cuando estaba en su puesto de trabajo.
El autor de los disparos, que se movilizaba en un Fiat rojo, dejó en el lugar una nota con una amenaza contra el gobernador provincial Maximiliano Pullaro y el ministro de Seguridad de Santa Fe, Pablo Coccocini. Según trascendió, ingresó al lugar con arma de fuego y le disparó dos veces en el pecho y un balazo impactó en su cabeza. Los primeros aportes indican que se movilizaba en un automóvil con dos ocupantes a bordo.
A su vez, en horas de la tarde colgaron un cartel sobre el puente que se eleva sobre avenida de Circunvalación y Bvard. Oroño con un mensaje intimidatorio contra el mandatario provincial. «Pullaro y Cococcioni se metieron con nuestros hijos y familiares… van a seguir las muertes de inocentes taxistas, colectiveros, basureros y comerciantes», es el texto escrito sobre un trapo que sorprendió a los automovilistas que se desplazaban por la zona.
Tras la situación de inseguridad que vive Rosario por los homicidios de dos taxistas en noches consecutivas, el ataque al colectivero, que aún se encuentra en grave estado, y una serie de atentados que no dieron tregua en las últimas horas, el gobierno nacional anunció el envío de un refuerzo de efectivos de Fuerzas Federales para patrullar las calles de la ciudad. Además, contarán con el apoyo logístico del Ejército Argentino, según indicaron desde Nación.
Dado los atentados perpetrados, y por pedido expreso del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich activó el Comité de Crisis para Rosario.
