Tan sólo un día antes de que el jefe de la Policía Federal de Santa Fe sufriera un ataque a balazos, se había conocido la denuncia pública del fiscal federal Walter Rodríguez, quien apuntó contra esa fuerza achacándoles una «corrupción institucional alarmante». Según sus dichos, hace dos años, en mayo de 2017, le había informado a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich lo que él consideraba una «situación de gravedad institucional!» porque la policía provincial y federal «estaban sospechadas de tener fuertes vínculos con las organizaciones narcocriminales», situación que afecta las investigaciones del Ministerio Público Fiscal. Además, el fiscal Rodríguez manifestó no haber recibido ninguna respuesta por parte de Bullrich por lo cual le cursará una «nueva comunicación para que adopte las medidas necesarias.

Según lo publicado en el diario Rosario 12 este domingo, todo lo denunciado está fundamentado en el requerimiento de elevación a juicio de la causa contra el «empresario» Sergio Norberto Villarroel, más conocido como el zurdo, su compañera y a una pareja de operadores inmobiliarios por supuesto «lavado de activos».

En dicha acusación, Rodríguez afirmó que «está acreditado que el patrimonio de Villarroel y su pareja (tres inmuebles, once autos, dos camiones, una embarcación y un tractor) «tiene su origen» en la venta de sustancias ilegales» y explicó el funcionamiento de la organización «narcocriminal», vinculada a un supuesto «cartel transnacional».

Según lo investigado por Rodríguez, para asegurar ese negocio, Villarroel era «favorecido por un complejo entramado de protección policial» y en la causa consta que el «Zurdo» tenía comprada a toda la Policía». Esto fue acreditado por varias escuchas telefónicas.

Alarmante gravedad institucional

Fue en ese contexto que el 3 de mayo de 2017 el fiscal Walter Rodríguez cursó el alerta para la ministra Patricia Bullrich y le comunicó que la provincia vive una «situación de gravedad institucional en materia de corrupción policial». En la nota que le envió le informaba que la fuerzas federales santafesinas estaban «sospechadas de tener fuertes vínculos con organizaciones narcocriminales, ya sea por acciones de cobertura o involucrada en forma horizontal o directamente como subrogantes de éstas, lo cual afectó y sigue afectando el normal desenvolvimiento de la Fiscalía a mi cargo».

Ante la falta de respuesta, Rodríguez cursó una segunda comunicación a la ministra Patricia Bullrich, advirtiendo sobre la repetición de ese fenómeno. «Intervine en numerosasa causas donde aparecen involucrados miembros de la fuerza de seguridad nacionales y provinciales».

Además, Rodríguez remarcó que «como fiscalres tenemos la obligación de conducir investigaciones de manera técnica y nos valemos de la colaboración de las fuerzas de seguridad para los trabajos operativos y tenemos graves dificultades para poder cumplir este último aspecto».

Sorprendida

Por su parte la ministra Patricia Bullrich se mostró sorprendida por los dichos del fiscal Walter Rodríguez y negó tener conocimiento de sus denuncias. «Nunca tuvimos ese oficio a mano», afirmó.

La ministra señaló que en mayo pasado se descubrió un «acontecimiento de corrupción» en la delegación Santa Fe de la Policía Federal y fue entonces cuando se relevó al entonces jefe, para colocar en el cargo a Valdés.

La funcionaria se mostró sorprendida por los dichos del fiscal Rodríguez y aseguró que «nunca» tuvo «a mano» la investigación sobre la supuesta corrupción en la fuerza.

«Nos sorprende lo que dice Rodríguez porque nunca tuvimos esa investigación en la mano. No sé adonde fue ese oficio, porque nunca lo tuvimos en la mano. Fuimos a Santa Fe muchas veces y nunca tuve una llamada de Rodríguez», sostuvo en el mismo sentido.