Los investigadores del presunto femicidio de Cecilia Strzyzowski, desaparecida en Chaco desde el 2 de junio último y por cuyo crimen permanecen detenidas siete personas, entre ellas su marido y sus suegros, solicitaron la utilización de un georadar para intentar determinar si los restos de la joven de 28 años pudieron haber sido colocados debajo del pavimento en una calle del Barrio Emerenciano Sena, de Resistencia.

Fuentes oficiales, judiciales y el abogado Gustavo Briend, quien representa a la familia de Cecilia, confirmaron que el georadar será aportado por Gendarmería Nacional y será utilizado en un tramo de 100 metros de asfalto que se colocó unos días después de la desaparición de Cecilia.

Fuentes oficiales explicaron que el equipo de georadar de Gendarmería viajará esta misma noche hacia Chaco y se pondrá a disposición de la Justicia provincial para el trabajo en ese barrio.

Los voceros agregaron que, además, viajará un equipo especializado de gendarmes con un can adiestrado en la búsqueda de restos humanos.

Durante la jornada de hoy, el Equipo de Fiscales Especial (EFE) que se conformó para la investigación del caso tomó declaración al dueño de la empresa que participó en la obra de pavimentación de esa cuadra y confirmó que había sido diseñada con anticipación por la Dirección de Vialidad de la ciudad de Resistencia.

Los voceros explicaron que el testigo dijo que la pavimentación de esa cuadra «fue parte de las obras diseñadas por vialidad» y confirmó que la finalización del trabajo fue los primeros días del mes, es decir, luego de la desaparición de Cecilia.

El abogado Briend afirmó que el testigo fue «el dueño de la empresa de hormigón que trabajó en el lugar» y dijo que «a partir de esa declaración, más el plano de obra y otros elementos, se solicitó ese georadar para intentar detectar si bajo el pavimento existe algún tipo de resto humano».

El letrado agregó en declaraciones a la prensa que la utilización del georadar podrá ser utilizado también en «otras escenas que fueron investigadas como, por ejemplo, en la casa de los sospechosos».

La hipótesis sobre la posibilidad de que debajo del asfalto pudieran estar los restos de Cecilia surgieron a raíz del testimonio de vecinos que, según aseguraron, esa obra se realizó dos días después de la desaparición de la joven y que se llevó a cabo durante la noche, un horario que no es habitual para ese tipo de trabajos.