Por unanimidad, la Cámara de Diputados convirtió hoy en ley la iniciativa que prorroga por cuatro años la suspensión de los desalojos en tierras habitadas por comunidades indígenas.

La ley 26.160 de propiedad había sido creada en 2006 y prorrogada dos veces ante el incumplimiento de los plazos para la realización del relevamiento catastral de pueblos originarios.

La urgencia en el tratamiento de la ley contra los desalojos se debió a que el 23 de noviembre próximo vencía el plazo que protege a esas comunidades, lo cual motivó fuertes reclamos y movilizaciones.

En el Senado, la iniciativa había sido aprobada por unanimidad el 27 de septiembre pasado, pese a los intentos previos del oficialismo por reducir de cuatro a dos años el plazo de la prórroga.