No es novedad la crisis del sector de los kioscos, que viene siendo advertida por la Cámara de kiosqueros desde el minuto cero del aislamiento social obligatorio, tanto en Rosario como a nivel nacional.

Tal es así, que si no se atienden las necesidades que esta sufriendo el sector, se estima el cierre de aproximadamente 10 mil kioscos a nivel nacional. En diálogo con Conclusión, Marcos Di Filippo, el titular de la Cámara de Kioscos  Rosario, quien expuso la problemática a este diario y brindó detalles de los problemas que atraviesa el sector.

Al consultarle sobre el panorama real que está sufriendo el sector, el referente mencionó que «son diferentes motivos por lo que pensamos que van a cerrar 10 mil kioscos. Uno de ellos es el aislamiento social y obligatorio. Nosotros, desde la Cámara de Kiosqueros aceptamos y respetamos está decisión pero lamentablemente el kiosco trabaja con clientes de paso. Hablando con los referentes de las distintas provincias, calculamos que bajamos las ventas entre un 75 y un 80%».

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«Sumado a esto, el alquiler, que bien sabemos es un contrato entre dos privados y no podemos tener el dinero para poder afrontar estos gastos y estamos a la buena voluntad del dueño de la inmobiliaria, que no en todo los casos se portan de buena manera con el kiosquero», añadió Di Filippo.

Sobre el faltante de los cigarrillos, el titular de la Cámara de Kioscos mencionó que «aparte el tema del cigarrillo. El ingreso que tiene el kiosco por el cigarrillo es de casi el 50%, sumado a que es un llamador para que se lleven otros productos. Entonces al no tener cigarrillos, el cliente no viene al kiosco a comprar otros productos porque no hay cigarrillos».

Los aumentos de precios de las empresas que suministran los productos de primera necesidad van en detrimento del los pequeños negocios. Al respecto, Di Filippo expresó que «otros problema que sufrimos los kioscos es el aumento de precios de los productos de primera necesidad, como la primera marca de lácteos y leches. Las empresas nos ofrecen los productos a un precio máximo de lo que sugiere el gobierno nacional».

Y agregó que es necesario una respuesta urgente de parte del Estado municipal, provincial y nacional para acompañar el sostenimiento del sector. «Por esto pensamos que ese número de kioskeros van a tener que cerrar sus puertas, sino hay una respuesta inmediata del gobierno nacional como el provincial. Nosotros estamos pidiendo es que se revea el pago de impuestos. Nosotros queremos pagarlos y creemos que es muy importante, pero lo que pedimos es tiempo y que nos hagan planes de pago sin intereses», concluyó Di Filippo.