El fin de semana largo arrojó un balance positivo para sectores ligados a la hotelería y la gastronomía local. La concurrencia de turistas a la ciudad impulsó una ocupación cercana al 48% en el primer rubro, mientras que el movimiento de los rosarinos generó un alza de la actividad en el segundo.

«En el tema de hotelería, estuvimos en un promedio de ocupación del 47,9%. Eso nos dispara un mayor optimismo», informó Carlos Meliano, titular de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica, en declaraciones a Conclusión.

La suba en la ocupación muestra una clara diferencia con la actividad registrada durante el resto de los fines de semana del año, donde el promedio de ocupación estuvo en un 12%. Ese porcentaje ascendió fuertemente durante las vacaciones de invierno, donde hubo picos de 35% en julio, pero esta vez creció aun más.

«Siempre hay que recordar que tenemos un aforo del 50%. Igualmente esto nos dispara el optimismo de ver el posicionamiento que tiene Rosario los fines de semana largos», expresó Meliano.

Gastronomía

«Con respecto a la gastronomía, que depende más del rosarino, fue un fin de semana muy bueno en términos de trabajo, porque la gente aprovechó este clima tan amigable que hemos tenido. Los lugares que tienen espacio al aire libre tienen un diferencial, ya que la gente opta por esa opción por cuestiones sanitarias», comunicó el presidente de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica.

El alza en la concurrencia no tuvo un único foco y pudo registrarse en los corredores de Pichincha, Pellegrini y zona norte. Además, tanto bares como restaurantes y cervecerías vieron crecer la demanda durante el fin de semana. Es por eso que Meliano recordó que están pidiendo ampliar el horario para hacerle frente a la demanda.

Desde el sector, entendiendo que la situación sanitaria lo permite y el nivel de actividad muestra una tendencia al alza, insisten en su pedido de extender el horario habilitado para el funcionamiento de la gastronomía.

«Estamos viendo en otras ciudades similares a Rosario que tienen mejoras en esto. Lo pedimos en vísperas del decreto lo hemos solicitado, pero no obtuvimos respuestas», manifestó el referente sectorial.

El pedido busca aprovechar el crecimiento de la demanda en la gastronomía, pero también apunta a poder prepararse para otras épocas del año donde la asistencia suele ser mayor debido al cambio de temperatura.