Hace semanas que los lácteos son uno de los temas más preocupantes por el desmesurado y rápido incremento de precios que sufrieron. En tan sólo 15 días el porcentaje fue sorprendente al punto que en Rosario, el litro de leche superó los $58.

En tanto, como se venía anunciando, la oferta de marcas y opciones en las góndolas es escasa. Hay desabastecimiento de segundas marcas y los consumidores no tienen otra opción que gastar en la única posibilidad que ofrecen.

Datos que alarman: Los chicos de los barrios vulnerables de La Plata toman la mitad de la leche que necesitan para crecer sanos

Así lo determinaron los datos preliminares del relevamiento, que lleva adelante la organización La Plata Solidaria en barrios como El Mercadito, San Carlos, Los Hornos y Altos de San Lorenzo, según publicó el diario El Día. «Decidimos hacer este relevamiento ante la creciente demanda de
leche por parte de los chicos en escuelas y merenderos de la zona de El Mercadito, La Bajada y La Unión», explicó Pablo Pérez, coordinador de La Plata Solidaria.

Precisó que más tarde el trabajo se extendió a los barrios Los Hornos, Altos de San Lorenzo y San Carlos, donde se obtuvieron datos «iguales o peores» que actualmente se están procesando.

Según el relevamiento, los chicos de los barrios vulnerables están tomando la mitad del mínimo de leche recomendado -se sugieren dos tazas por día por lo menos y la mayoría de las familias consultadas dicen que están tomando sólo una. De acuerdo a lo publicado, La Plata Solidaria consultó a 22 familias y 68 chicos de entre 6 y 12 años sobre el consumo de leche.

De acuerdo a los datos obtenidos, el 63 % de las familias afirmó que «no compra más leche, habiéndola sustituido por mate cocido o té», mientras que el 68 % de los niños considerados «reciben su único vaso de leche en comedores, merenderos y escuelas de la zona».

Según Pablo Pérez, «en las entrevistas personalizadas vemos con preocupación que la leche ha dejado de ser objeto de consumo y los niños, básicamente de entre 6 y 12 años, reciben su única copa en la escuela y merenderos».

Los relatos recopilados por los integrantes de la ONG hacen hincapié «en la imposibilidad económica de acceder al producto» que en estos barrios oscila entre los 43 pesos (sachet) y 65 pesos ( la caja de leche larga vida)».

Los especialistas indican que una ingesta insuficiente de lácteos «tiene un impacto negativo directo en el desarrollo óseo». Agregan que tomar menos leche que la indicada también genera un déficit de vitamina D, compuesto que se relaciona con la protección contra infecciones.

Los barrios El Mercadito, la Bajada y La Unión, ubicados en las inmediaciones de la autopista La Plata-Buenos Aires, se caracterizan por compartir una larga lista de carencias. A la falta de servicios esenciales se suma el hecho de estar emplazados en tierras inundables.

La mayoría de sus habitantes está desempleado y la recolección de cartones es una de las principales actividades que sostienen a familias casi siempre numerosas.