El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, aseguró este jueves que el Gobierno necesita de la paciencia de «dos actores fundamentales» para su programa económico, los que le prestan dinero a la Argentina y los consumidores que deben pagar tarifas más altas.

Sostener esa «paciencia», según el ministro, es uno de los máximos desafíos que tiene la administración de Mauricio Macri para continuar «estabilizando» la economía después de todos los «desequilibrios» acumulados en los últimos años.

Al referirse a la idea de «pobreza cero» que prometió el Gobierno, el funcionario admitió que no es una tarea sencilla dado que aún quedan muchas cosas por corregir en la economía: «Nos queda un camino larguísimo pero se ha iniciado».

Así se expresó al hablar ante economistas, empresarios y periodistas en el Argentina Summit, evento organizado por la revista británica The Economist en un lujoso hotel de la Ciudad de Buenos Aires.

Consultado sobre el mejor éxito del Gobierno, Dujovne consideró que no puede separar los logros fiscales con los que tienen que ver con la política monetaria, porque están entrelazados y trabajando de manera simultánea.

«En las reformas que nos embarcamos estamos trabajando todos, incluyendo a las provincias, y estamos haciendo un esfuerzo muy grande», sostuvo el funcionario.

Y sobre el desafío más grande que tiene la gestión Cambiemos, el ministro de Hacienda consideró que habiendo partido de un punto en el que el país estaba al borde de una eventual crisis económica, los retos siguen siendo muchos.

«Arrancamos con un gasto público récord pero también con déficit y presión tributaria récord, tenemos muchos objetivos a la vez. Tenemos que bajar el déficit pero también los impuestos, por eso tenemos un camino gradual», explicó.

Dujovne señaló que el Gobierno necesita del respaldo de los inversores que le prestan dinero para financiar el elevado rojo fiscal y de los ciudadanos, que cada dos años van a las urnas a votar.

«Necesitamos la paciencia de dos actores fundamentales: de quienes nos prestan, que deben confiar en nosotros, y de la sociedad en su conjunto que está afrontando la actualización de las tarifas de los servicios públicos de las que antes pagaba sólo el 8%», sostuvo.

Y agregó: «La magia no existe y la idea de que los servicios públicos eran gratis era una mentira».