El salario real de los trabajadores le ganó por dos puntos a la inflación de este último año, según un informe del Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía (MATE). No obstante, los salarios se encuentran peor que en el último año del gobierno de Mauricio Macri. Los economistas que realizaron el informe sostuvieron que el Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVyM) es un instrumento que no fue usado por los últimos gobiernos nacionales, y podría ser una salida de la crisis.

Este grupo de economistas sostiene en su publicación que los salarios aumentaron un 118% desde julio del año pasado (último mes de que se tenga registro de la evolución oficial de los salarios), mientras que la inflación acumulada suma 113 puntos porcentuales: en términos reales, los salarios le ganaron en 2% a los precios.

«El salario mínimo vital del móvil es una herramienta de las que tiene el gobierno para arrastrar hacia arriba y poner un piso real de ingresos a los trabajadores, sirve como piso de ingreso de los trabajadores”, explicó a Conclusión el economista Lavih Abraham, integrante del MATE, y agregó: “Insistimos en esto porque el SMVyM es una herramienta que se puede usar o se puede abandonar».

El estudio tiene como base el análisis de “cómo acompañaron los salarios a la inflación, si la pudieron seguir, empardar, ganar o si se quedaron mirando desde atrás”. Desde el 2003, año en que inicia el análisis hasta julio del corriente año, el organismo estudió cómo los diferentes gobiernos modificaron la capacidad adquisitiva de la población y cómo evolucionó de manera constante.

«(El SMVyM) Era muy bajo durante la década de los ‘90, durante el gobierno de Menem. Tan bajos que prácticamente nadie lo ganaba, no tenía ningún tipo de influencia en el salario final. Era una cuestión casi completamente simbólica», evaluó Abraham, y profundizó: “El SMVyM es un salario legal mínimo por debajo del cual nadie puede ganar en ningún empleo. Durante el gobierno de Néstor Kirchner se va haciendo cada vez más alto, y durante el primer gobierno de Cristina Kirchner. Durante el gobierno de Mauricio Macri se produce una gran caída del SMVyM, y durante el gobierno de Alberto Fernández no se recuperó”.

El especialista recibido de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Rosario señaló que los salarios no fueron usados durante el gobierno del Frente de Todos como un instrumento para apalancar los salarios al alza: «La gran caída se produce durante el gobierno de Macri se produce al no actualizar el salario mínimo, vital y móvil. Lo que pasa es que el salario queda fijo y, al haber inflación, el salario baja en términos reales. Durante este gobierno, en vez de recuperar esa herramienta, no se lo tuvo en cuenta«.

Esto último puede observarse al medir el crecimiento de los salarios reales. El MATE observa desde el 2003 a la actualidad, mostrando un aumento de los ingresos un 39% durante el gobierno de Néstor Kirchner, hasta el 2007. Durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, los salarios aumentaron un 28% (creciendo 20 puntos en el primer mandato y 8 puntos durante el segundo), para perder 22 puntos porcentuales durante la gestión de Mauricio Macri. Pero el dato impactante es el porcentaje en que variaron los ingresos con Alberto Fernández: decrecieron un 0,6%. En 44 meses de mandato el salario real está casi en el punto inicial.

Desde MATE hacen la aclaración de que los datos del informe son hasta el mes de julio, debido a los tiempos que se toma el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos para publicar sus relevamientos sobre la situación de los salarios de los trabajadores. Esto significa que el informe no incorpora en el análisis la devaluación oficial de agosto pasado ni los registros inflacionarios de agosto y septiembre.

Dicho esto, Abraham sostiene que: «lo que se logró en este gobierno es mantener ese salario, que nunca recuperó los 22 puntos que perdió en el gobierno de Juntos por el Cambio, y que no caiga más. Seguramente al final del mandato se recupere un poquito más, va a terminar alrededor del cero por ciento. No obstante, el contexto que hay que dar es el de muy alta inflación. Por un lado, el gobierno del Frente de Todos tiene un mérito en el sentido de que, a pesar de la alta inflación que hubo durante su gestión y que estamos viviendo, así todo el salario en promedio se mantuvo. No perdió. Podría haber perdido por goleada porque la instalación fuertísima, sin embargo los salarios mantuvieron el valor en términos reales. Si queremos ver el lado vacío del vaso, este mantenimiento en términos reales es muy difícil de percibir por la ciudadanía, por los trabajadores, porque efectivamente aunque uno mantenga su poder adquisitivo, en una economía con 120% de inflación es muy difícil sostener, planificar, ordenar una vida en sociedad».