Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (enviado especial)

Según datos de la Cámara Industrial de las Manufacturas del Cuero y Afines (Cima), durante el período enero-junio de este 2017 ingresaron al país 18.662.367 productos de marroquinería, lo que significa un aumento de 4.540.653 unidades respecto a las 14.121.714 que ingresaron en igual período del año 2016.

En diálogo con Conclusión, el presidente de Cima, Ariel Aguilar, dijo que «se verifica una maniobra de subfacturación por parte de los importadores que perjudica no sólo al sector marroquinero nacional, sino también al Estado, que deja de percibir recaudación y recursos».

Para el presidente de las industrias del cuero, “el Estado debe actualizar los valores criterio, que son los que se usan como referencia para declarar en las importaciones. Estos han quedado muy desactualizados y permiten que importadores inescrupulosos puedan declarar artículos por valores mucho más bajos de los que tienen en el mercado, como está ocurriendo en la actualidad”, advirtió.

Sin embargo, medido en dólares, «los valores no aumentaron sino que han disminuido, porque durante el primer semestre de 2017 las importaciones de marroquinería sólo llegaron a u$s 52.566.517, mientras que en el mismo período de 2016 habían sido de u$s 64.110.309», precisó Aguilar.

«Esto representa una disminución del 18% en dólares frente a un aumento del 32,15% en unidades», indicó el industrial.

Además, el empresario del cuero señaló a este medio que en el sector hay gran preocupación por “una serie de políticas impulsadas por el gobierno como las negociaciones de los tratados de libre comercio con México y la Unión Europea y la agilización de los trámites y controles en la Aduana para las importaciones».

De acuerdo a una evaluación de su parte, Aguilar señaló que estas medidas «sólo parecen favorecer la llegada de productos manufacturados del resto del mundo”.

Pero más cáustico resultó en su apreciación al indicar que “son señales que muestran un relajamiento de la administración del comercio exterior y la voluntad de que nuestro país aumente sus exportaciones de productos primarios agropecuarios a costa de resignar su industria”, agregó.

Otro dato que surge del informe es que desde diciembre de 2015 la cantidad de importadores de artículos de marroquinería pasó de 406 a 760 en el año 2017. Esto implica que 364 nuevos actores comenzaron a importar mercaderías de este sector, mientras que durante este período han cerrado 50 fábricas y talleres y se han perdido más de 1.000 puestos de trabajo.

Más grave es lo que ocurre con los productos de cuero del rubro marroquinería. En este caso, como se detalla en el gráfico adjunto, las importaciones aumentaron durante el primer semestre de 2017 un 221,62% respecto a igual período de 2016.

 

 

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