La minera estadounidense Livent, operadora del proyecto de litio Fénix en la provincia argentina de Catamarca, ha recibido una multa de la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos) de más de 435 millones de dólares por subfacturar más de 13 millones de dólares en 2022. La denuncia de subfacturación de la empresa Minera del Altiplano (LIVENT Corporation) emergió en abril de 2022 y ha estado en desarrollo desde entonces.
Livent comenzó a subfacturar en 2017 después de una modificación de contrato con la provincia de Catamarca. Esta subfacturación fue detectada al comparar el precio de venta de litio de Livent con el de Chile. Mientras Chile mostró un aumento significativo en las ventas de litio, Argentina no registró un aumento comparable. Esto levantó sospechas sobre la minera y su gestión de las ventas de litio.
En un reciente giro de los acontecimientos, Livent ha reconocido que realizó maniobras con sus declaraciones de exportaciones y ha pagado a la AFIP unos 5.300 millones de pesos en multas. La maniobra involucró más de 400 operaciones de exportación realizadas por la compañía a una empresa asociada en el extranjero.
Livent, junto con la australiana Allken, es una de las únicas dos empresas con explotación activa de litio en Argentina. Recientemente, Livent y Allken anunciaron su fusión, creando la quinta empresa más grande de litio en el mundo, pero la única occidental en el top cinco, dominado por China. Con la concreción de la fusión entre ambas compañías, la extracción de litio en Argentina pasa a estar monopolizada, poniendo en evidencia una cuestión geopolítica de gran relevancia.
El legislador provincial Alfredo Marchiolli (UCR) ha pedido una auditoría y está presionando para que se lleve a cabo una investigación exhaustiva. Según Marchiolli, si Livent no hubiera subfacturado, la provincia de Catamarca podría haber recibido hasta $2.207.840.801 en regalías mineras entre 2019 y 2022.
Además de las implicancias económicas, también hay consecuencias legales por esta subfacturación. La provincia considera que se ha cometido una estafa, mientras que a nivel federal se debe determinar si solo es una infracción al código aduanero o si se trata de contrabando o contrabando agravado.
El caso de Livent pone de relieve la importancia de una regulación y un control más estrictos en la industria minera, especialmente en la extracción de litio, un mineral crítico en la era moderna. Asegurar que las empresas operen de manera justa y transparente es esencial para proteger los intereses económicos y medioambientales del país.
