La deuda en 2019 puede llegar al 90% del PBI, según estimó la calificadora de riesgo Moody’s este jueves en su conferencia anual del hotel Four Seasons, lo que pone en riesgo el cálculo de déficit cero del gobierno.

De igual manera, el país continuará con la calificación de B2 estable, aunque el ratio de deuda es mayor al de otros países en el mismo nivel. Los intentos del Gobierno por estabilizar el tipo de cambio fallaron por completo, aseguró Gabriel Torres, vicepresidente de la oficina de análisis crediticio.

El préstamo del FMI, a su vez, conlleva “un costo político muy grande”, según analizaron desde la calificadora, al tiempo que aseguraron que la meta fiscal posiblemente llegue al 0% o cerca el año entrante.

Moody’s estima que el 2018 terminará con una caída del PBI de 2,5% y en 2019 se sumará una caída adicional de 1,5%, pero con los dos últimos trimestres con variación interanual positiva si la cosecha se concreta sin dificultades.

Respecto de la tasa del 60% que Guido Sandleris garantizará hasta fin de año, en Moody’s consideran que «parece alta para el mediano plazo». En consecuencia, los especialistas de la calificadora que debería tender a bajar en 2019. De lo contrario, la caída del 1,5% «puede ser que termine siendo optimista».

Según entienden los analistas de Moody’s, la política monetaria anunciada por Moody’s tiene un punto débil, que es el bajo monto de intervención diaria porque el mercado tranquilamente podría ir contra los 150 millones de dólares de los que dispone el Banco Central para defender el valor de la moneda. En este sentido, consideraron que con este tope «el Banco Central no va a defender a muerte la banda superior» y si el mercado quiere operar por encima, no va a impedirlo, analizaron desde el portal La Política Online.

Para la calificadora, el nuevo acuerdo alcanzado con el FMI «da margen de maniobra, pero no resuelve el problema estructural» de la Argentina y las razones por las que es mucho más propensa que las demás economías emergentes a la volatilidad mundial. Es que, como explicaron los analistas de Moody’s, el país está expuesto al riesgo climático para sus exportaciones, a diferencia de los países mineros que solo están expuestos al riesgo precio de los commodities. En particular, apuntaron al riesgo financiero como «riesgo estructural» porque a diferencia de otros países similares, «la Argentina no tiene profundidad financiera».