La cadena de supermercados Coto transita la crisis con las mismas dificultades que tienen la mayoría de las empresas argentinas debido a la profunda crisis económica que no tiene perspectivas de mejoría en tiempos cercanos.
La venta en la inmensa mayoría de sus sucursales experimenta por estos días una merma de casi un 50% debido a que según dijeron fuentes a Conclusión “la asistencia de los clientes considerados de clase media tuvo una caída considerable».
La principal caída se produjo por la “poca y casi nula venta” de electrodomésticos y muebles, los cuales tienen aproximadamente un 200% de utilidad en dicha cadena y el sector social mencionado compraba esos productos”.
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Por otra parte, se observa también una importante baja en la venta de sus carnicerías, sector considerado “mascarón de proa” de Coto por los precios ventajosos que allí se venden.
Además, no se están cumpliendo las expectativas esperadas de la promoción de ventas a través de las tarjetas de crédito ofrecidas a partir de un convenio con el Banco Provincia, a través de la cual los clientes tienen una devolución del 50 % del importe abonado por la compra de cualquiera de los productos que se ofrecen en los puntos de venta de Buenos Aires.
