Los precios del trigo en el mayor mercado de granos de Argentina se mantienen bajos a pesar de la liberación de las ventas externas instrumentada por el nuevo Gobierno para mejorar los ingresos de los productores, dijo el lunes en un comunicado Confederaciones Rurales Argentinas.

Tras asumir el gobierno, el presidente Mauricio Macri eliminó impuestos y límites a la exportación del cereal, dos políticas de la gestión anterior que golpearon el negocio, ya que hacían caer el precio doméstico del grano en uno de los principales proveedores internacionales de trigo.

«Vemos con preocupación la continuidad de las distorsiones en el mercado de granos de Argentina, lo que genera descuentos de precios a los productores, atentando contra la necesaria normalización de los mercados, poniendo en riesgo el éxito de las medidas adoptadas», señaló Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) en un duro comunicado.

«En el caso de trigo (en particular el trigo Cámara), los compradores ofrecen 130 dólares por tonelada cuando podrían estar pagando al menos 160 dólares», detalló CRA, que es una de las cuatro principales agrupaciones de productores del país.

Pero el cambio hacia políticas más favorables no resultará en una mejora inmediata de los precios en la Bolsa de Comercio de Rosario, donde opera la mayor plaza agrícola de Argentina.

«No es sorpresa que en época de cosecha haya sobre oferta y que los compradores manejen el mercado. Se venderá lo que haga falta ahora y después, cuando venga Brasil (a comprar) en el segundo semestre, subirá el precio», dijo Santiago Cameron, secretario de la cámara sectorial Aaprotrigo.

El destino de la mayor cantidad de embarques de trigo es Brasil. Los agricultores locales actualmente están recolectando el trigo del ciclo 2015/16, cuya cosecha sería de 10,9 millones de toneladas, según datos oficiales.

En Rosario se ubica el mayor polo agroexportador del país, donde gigantes como Cargill, Bunge y Louis Dreyfus poseen plantas molineras y puertos propios.

«No le podemos pedir al Gobierno más de lo que hizo, que es libertad de exportar y sin retenciones (impuestos a las exportaciones). Lo demás es una pulseada del sector privado con el sector privado, a ver quién gana», añadió Cameron.

El diario La Nación, había sugerido el lunes pasado esta inquietud de los productores.