El presidente Alberto Fernández visitó este sábado los estudios de C5N como invitado del programa Sobredosis de TV y, entre varias definiciones, defendió el proyecto que grava  a las grandes fortunas y proyecto de reforma judicial. Además, se mostró optimista sobre las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional, aseguró que Argentina se va a recuperar muy bien de la pandemia y habló sobre el congelamiento de las tarifas de cable, internet y telefonía, a la que definió como «de una racionalidad económica absoluta».

En relación al diálogo con el FMI, aseguró que el Gobierno no hará «un ajusta que pague la gente» y dijo confiar en que la titular del organismo, Kristalina Georgieva, lo «va a entender». «Tengo mucha confianza en que ella se dé cuenta que no le podemos hacer pagar más costos a los que ya han perdido todo, a ellos solo hay que volver a ponerlos en el escenario de la sociedad».

Al respecto, el mandatario aseguró que “Argentina saldrá adelante con sus recetas”, y no con los planes que dicte el organismo internacional de crédito.

Además, el presidente alabó la gestión del titular del Ministerio de Economía, Martín Guzmán, en la renegociación de la deuda con los acreedores privados.  «Es un hombre que dejó su prestigio como académico en el exterior para hacer una contribución patriótica. Nos dio una estrategia para resolver el tema de la deuda”, afirmó el Presidente.

Gravar las grandes fortunas

En relación al proyecto presentado  en la Cámara de Diputados para gravar las grandes fortunas advirtió que «no es un impuesto, sino una contribución» y consideró que «la responsabilidad y el compromiso social debería obligar a ciertos sectores a entender que hace falta contribuir» en tiempos de pandemia.

El pasado viernes, diputados del Frente de Todos presentaron el proyecto que propone crear por única vez un impuesto a los patrimonios que superen los 200 millones de pesos, a fin de reforzar la recaudación fiscal, que tuvo una fuerte caída por la crisis económica generada por la pandemia de coronavirus.

Mediante este tributo, el oficialismo calcula que se podrán recaudar unos 300.000 millones de pesos, que serán invertidos en obras públicas, mejora del sistema de salud, apoyo a las pymes y programas sociales, entre otros.

«Ha ocurrido en Alemania y en otros países, pero ellos tienen empresarios más solidarios que en Argentina. Acá afecta a 12 mil personas sobre un total de 44 millones», explicó el Presidente.

«La responsabilidad y el compromiso social debería obligarlos a entender que la contribución hace falta», sostuvo Fernández y aclaró que esos fondos tienen «fines específicos, destinado a los sectores más pobres, y al sector productivo, a la pequeña y mediana empresa». «Tiene fines muy específicos, no es que el Estado va hacer lo que quiere».

Según consideró el mandatario, las versiones periodísticas que circularon esta semana sobre un supuesto aumento en la alícuota del Impuesto a las Ganancias «fueron la reacción» a la presentación de esa iniciativa que se formalizó ayer en la Cámara de Diputados.

Congelar e intervenir en las tarifas de telefonía, cable e internet
En otro tramo del programa, Alberto Fernández defendió la decisión de declarar servicio público y esencial a internet, la telefonía móvil y la TV cable, al sostener que es de una «racionalidad económica absoluta» y cuestionó cómo desinforman algunos medios que “no dan cuenta de las ganancias que tuvieron en estos años las grandes empresas de telecomunicaciones.
Días atrás, el Gobierno decidió declarar a la telefonía celular y fija, prestaciones de internet y la TV paga como servicios esenciales, mientras que dispuso congelar su precio hasta el 31 de diciembre.
«Hoy la telefonía celular es nuestra oficina. Antes era un lujo la televisión por cable, hoy lo tiene el 80 por ciento de los hogares. Con ese nivel de utilización es un servicio público», afirmó.
Fernández recordó que en el año 2003, el Estado tomó la decisión de intervenir y regular la telefonía fija, que en ese momento era el servicio que utilizaba la mayor parte de la sociedad. «Hoy, ese servicio casi desapareció. En la Argentina hay unos 44 millones de habitantes y tenemos 65  millones de celulares. Entonces, ¿como no vamos a intervenir? Ya es un servicio público», recalcó.

También le contestó a los críticos a la medida, al señalar que «no quedamos afuera del mundo, del mundo nos dejaron afuera las políticas de ellos», en alusión a Juntos para el Cambio. «Nosotros estamos volviendo al mundo trayendo inversiones. Ellos destruyeron la economía y las inversiones se fueron porque no tenían sentido», remató.
En el mismo sentido, relacionó el tema con las diferencias con el Gobierno de la Ciudad, que reclama permiso para brindar clases asistenciales a seis mil chicos que quedaron fuera de la escuela virtual. «Le dijo a Horacio (Rodríguez Larreta), el problema no es que los chicos no vayan a la escuela, el problema es que tengan la conectividad, cuando ya estábamos trabajando en esto», señaló.
Reforma judicial y más
En relación al proyecto de reforma judicial, que obtuvo media sanción en el Senado, Alberto Fernández cuestionó la postura de la oposición y senaló que hay sectores a los que les convienes que en la Justicia siga todo igual.
«Ni conocían de que se trataba  y ya estaban haciendo un banderazo en contra de la ley», criticó. «Hay una vocación de obstruir por obstruir». «Me asombra que mientan de este modo.Ni siquiera es una reforma judicial, es una ley que ordena el funcionamiento de la justicia federal en el país. No toca ningún juez», dijo el mandatario.
El Presidente aseguró  que los que se oponen a la Reforma Judicial quieren que todo siga igual.»Los que se oponen a la Reforma Judicial quieren que en la Justicia todo siga como hasta ahora. Nosotros no vamos a utilizar este proyecto para perseguir a los opositores. Esa es la mejor garantía que pueden tener. No les vamos a hacer a ellos lo que nos hicieron a nosotros», enfatizó.

Fernández remarcó además que esto no se trata de «poner o sacar jueces». «No puedo creer que sean tan cínicos. Hubo políticos y medios de comunicación que se sirvieron de los jueces y de los servicos de inteligencia. Este es un proyecto para ordenar la Justicia federal. Hay sectores que en realidad, se oponen porque quieren seguir direccionando a los jueces», subrayó el mandatario.
A lo largo de la noche, Fernández se tomó el tiempo para hablar sobre otros temas. Destacó las políticas del IFE y los ATP y se manifestó confiado en que el país “se va a recuperar rápido” cuando pase la pandemia de coronavirus. “No podemos olvidarnos que lo que le pasa a Argentina le pasa al mundo. Hay en los últimos días algunos indicios que son positivos. Nos vamos a recuperar y rápido cuando pase la pandemia”, vaticinó.

Por otra parte, advirtió que la situación por el coronavirus en el país es «aún crítica», admitió que «hubiera preferido esperar un poco más» para abrir los bares en la ciudad de Buenos Aires que podrán atender en mesas al aire libre y sostuvo que «cada vez que hubo una marcha, 15 días después crecieron los contagios».

«Le han hecho creer a la gente que el riesgo al aire libre no existe y no es así; el riesgo, es menor, pero existe» y reveló que le pidió al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, «ser muy estrictos en los protocolos» de los bares y restaurantes que podrán atender en mesas al aire libre, a partir del próximo lunes.

«Yo hubiera preferido esperar un poco más. El jefe de Gobierno porteño me planteó una presión muy grande de parte de los comerciantes. Pero no quiero cargar la responsabilidad sobre él porque es una decisión que tomamos en conjunto», dijo el Presidente.

Tras advertir que la situación por la pandemia de coronavirus en el país es aún «crítica», el jefe de Estado sostuvo que «cada vez que hubo una marcha, 15 días después crecieron los contagios».

En ese sentido, consideró que «en una pandemia no se critica con manifestaciones», dijo preferir que las personas «salgan a los balcones y toquen la cacerola» y afirmó que no le «parece feliz que un expresidente celebre la salida a la calle de la gente en plena pandemia» en referencia a Mauricio Macri.

En uno de los tramos más distendidos de la entrevista, Fernández contó que la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, le hizo días atrás una carta astral, que dio como resultado que “se encontraba predestinado a construir desde las cenizas”.

“Bueno, Vilma tiene esas cosas y me dijo que en la carta astral que me hizo le dio eso. La verdad que así fue cuando acompañé a Néstor (Kirchner) como presidente y ahora pasa lo mismo. La verdad es algo que no sufro. No me quejo», detalló.

En cuanto al rol de la oposición, Fernández marcó una diferencia entre quienes gobiernan y “los que escriben en Twitter, donde son todos inteligentes”, consideró.

Al respecto, diferenció entre gobernantes como Horacio Rodríguez Larreta y otros gobernadores e intendentes, que escriben en Twitter donde todos son inteligentes. «Quiero competir con aquellos que saben cuáles son los límites. Lo que dije ayer del centralismo porteño lo pensé toda la vida y no porque quiera rivalizar con alguien”, aclaró.

En ese sentido, se refirió al dirigente radical Ernesto Sanz, quien se preguntó recientemente “cuándo faltaba para que todo estalle”, y el mandatario sostuvo que lo que “debe pasar es que un hombre como él sea presidente”.

También se tomó un momento para hablar de Cristina Fernández y elogiarla,  al asegurar que tiene “una inteligencia singular”. “Nunca la van a escuchar hablar mal de la gente que menos tienen”.

En cuanto a la situación sobre la inseguridad, sobre todo en Buenos Aires, el presidente adelantó que entre el martes y el miércoles presentará “un plan integral” que prevé el despligue de 4.000 gendarmes en el conurbano bonaerense.