Tras el veto del presidente Mauricio Macri a la ley antidespidos, la Iglesia manifestó su preocupación por los «miles de trabajadores» que se encuentran
«sin acceso a sus derechos sociales» y sostuvo que «son señales de alerta que no se pueden desoír».
En el mensaje final de la Semana Social, pronunciado por Jorge Lozano, presidente de la Comisión Episcopal de la Pastoral (Cepas), la Iglesia se refirió a las «situaciones de precarización laboral en que están inmersos buena parte de los trabajadores, que no tienen acceso a sus derechos sociales ni protección del Estado y que son señales de alerta que no se pueden desoír».
En la misa de cierre del encuentro, Lozano, obispo de Gualeguaychú, formuló este mensaje en momentos en que las centrales obreras analizan la realización de una movilización y de un paro nacional por la situación del empleo.
Lozano también expresó la preocupación de la Iglesia «por los rostros concretos de quienes viven en la miseria y no cubren sus necesidades más elementales».
«Particularmente, tuvimos en cuenta la necesidad urgente de una adecuada nutrición infantil», aseveró el sacerdote y dijo que recogieron también «las urgentes preocupaciones por el cuidado del ambiente, la corrupción, el narcotráfico, la adicción a los juegos de azar, como amenazas serias al desarrollo integral y la
promoción humana».
En su mensaje en representación de la Iglesia Católica argentina, Lozano instó a «alentar el fortalecimiento del sistema democrático, la independencia de los tres Poderes del Estado, promoviendo la participación ciudadana».
Durante tres días, referentes del ámbito político, sindical y social expusieron en diferentes paneles y mesas de debate sobre diversos temas que preocupan a la Iglesia, en la edición número 28 de este encuentro que organiza la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia, que se llevó a cabo en un hotel gremial de la ciudad de Mar del Plata.