«El presidente de la Corte Suprema de Justicia Ricardo Lorenzetti consideró «muy importante» el tema de la corrupción, «en la Corte lo seguimos muy de cerca» indicó, al tiempo que planteó la necesidad de «que los tres poderes elaboren una política de Estado» respecto de esta cuestión.

El titular del máximo tribunal señaló que «la corrupción es un tema muy importante para las instituciones y en la Corte seguimos el tema muy de cerca» y, reconoció, que «hay que tener en cuenta que es un tema global» ya que «existe en todo el mundo un reclamo social contra la corrupción».

En este sentido, defendió la actuación de los jueces -«fue procesado un vicepresidente», ejemplificó- y evaluó que «hay pendientes todavía muchas reformas legislativas muy importantes».

«Debemos construir un sistema legislativo y judicial que favorezca la tarea de los jueces cuando investigan, porque no puede ser, por ejemplo, que los magistrados pidan informes y muchas veces no se los contesten» cuestionó.

Entrevistado por un medio porteño, Lorenzetti también determinó que en nuestro país, existe un avance del narcotráfico al considerar que «antes, teníamos el problema de que las drogas entraban por el norte argentino y los jueces de esa zona venían a vernos a la Corte. Ahora vienen con esos problemas los jueces de todo el país».

«La Corte viene trabajando en los casos de drogas desde hace muchos años. Y las cosas están mucho peor que cuando, en el caso Arriola, de 2009, despenalizamos la tenencia para consumo personal y señalamos que hay que concentrarse en perseguir a los narcotraficantes. Estamos mucho peor, pero nuestro pensamiento sigue siendo el mismo: debemos perseguir el narcotráfico, porque se viene agravando la narcocriminalidad organizada», afirmó el magistrado.

Finalmente, Lorenzetti ponderó el dictamen de la Corte que ordenó la devolución del 15 por ciento de los fondos coparticipables a tres provincias (San Luis, Córdoba y Santa Fe) al considerar que «el fallo tuvo consecuencias positivas» dado que hoy «tenemos a ambas partes (Nación y provincias) sentadas a la mesa, negociando». Todos los gobiernos tuvieron que negociar.