Al igual que con los aumentos de salarios, el cobro de miles de pesos por pasajes trascendió colores políticos. Una actividad que no es ilegal, pero que resulta insólita en un país donde las desigualdades son más que evidentes.

Los senadores nacionales, Pemo Guastavino y De Angeli, no fueron la excepción. Demuestran que ambos, a pesar de «la grieta», forman parte de los mecanismos de la vieja política que pretende enriquecerse a costa del trabajo del pueblo argentino. En tiempos donde desde ambas bancadas se refriegan los números de la pobreza, se juntan en sigilo para cobrar fortunas. Si bien la práctica no es ilegal, de mínima es injusta.

Aunque en los discursos, Macri insista con la idea de austeridad, la realidad demuestra que este privilegio se amplió desde la llegada de Cambiemos al gobierno. Gabriela Michetti autorizó que el valor del canje de pasajes aumente un 600% en dos años.

Los canjes de los Gualeguaychuenses

Según información publicada por el sitio Infobae, el senador Macrista Alfredo De Angeli, cobró el año pasado $76.348 en concepto de cambio de pasajes por tan solo los meses Enero, Febrero, Noviembre y Diciembre de 2016.

Guillermo «Pemo» Guastavino, alfil de Cristina Kirchner en la «década ganada», junto a Rodolfo Urtubey y María Teresa González, se llevaron en estos días $272.642 por los canjes de 2017.