El empresario Lázaro Báez, que permanece detenido mientras es investigado por lavado de dinero, afirmó hoy que no es «testaferro de Cristina Fernández ni de la familia Kirchner» en un reportaje brindado desde el penal de Ezeiza, en el que también aseguró que tanto él como sus hijos han sido «condenados anticipadamente».

«No soy testaferro de Cristina Fernández de Kirchner ni de la familia Kirchner», indicó Báez en una entrevista telefónica publicada hoy por el sitio Infobae, en la que además señala que «un testaferro no pediría por escrito que se investigue la obra pública».

En este sentido, el empresario consideró que «todo el mundo pretende que se corte el hilo en Lázaro Báez» y rechazó la existencia de un supuesto pacto de impunidad con la ex presidenta.

«No se trata de traición o no, sí creo que acá hay demasiada mano extraña para que, vuelvo a reiterarte, el hilo se corte en Lázaro Báez» consideró sin dar precisiones sobre quiénes debería apuntar la justicia.

En este sentido, indicó que «hay una investigación que aún no finalizó, acá hemos sido condenados anticipadamente», al referirse a la citación a indagatoria de sus hijos.

Báez fue consultado también sobre la situación que vivieron sus hijos la semana pasada al arribar al Aeroparque, donde los esperaban distintos móviles de televisión.

«Esa una expresión clarita de lo que estamos hablando, a mis hijos los insultaron y atrás sale el hijo de la ex presidenta, muy amable todo el mundo con una recepción fantástica», cuestionó.

«Nosotros no somos los que manejamos los intereses del país, ni tampoco éramos los que direccionábamos, como dicen, la obra pública. Ni nada que se refiera a concesiones» afirmó Báez, que finalmente rechazó gozar de condiciones privilegiadas: «La penitenciaría ha salido a mostrar la realidad de cómo estamos, que comparto con todo el resto de la gente que está. No tengo ningún privilegio».