El jefe de Gabinete, Marcos Peña, señaló que en el mundo había «decepción» con la Argentina de los últimos años y remarcó que ahora el principal desafío del país es «construir confianza» a largo plazo, porque «la pregunta que más hacen es cómo sigue esto después» del actual gobierno.

Durante la cena anual del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI) el ministro coordinador pidió a diplomáticos y dirigentes políticos de la oposición que tomen a la política exterior como una política de Estado, sobre la base de una integración al mundo sin «falsas dicotomías».

«La pregunta que más nos hacen es ¿cómo sigue esto después? Esta vocación de globalizarse, de generar confianza, ¿es un deseo de este gobierno, de la política, de los argentinos? Y estamos convencidos de que es un deseo mayoritario de la sociedad y de la  dirigencia política pero es responsabilidad de todos nosotros poder ayudar a transmitir ese mensaje porque no se puede construir una confianza de largo plazo desde esfuerzos espasmódicos», sostuvo Peña ante un auditorio de 350 personas.

En una heterogénea mesa principal del Auditorio del Buenos Aires Design se ubicaron el propio Peña, la canciller Susana Malcorra, el ex presidente Eduardo Duhalde, el nuncio apostólico Paul Tscherrig, el ex ministro de Economía Roberto Lavagna, el ex canciller Jorge Taiana, el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y el secretario de Cultura, Iván Petrella.

También se encontraban el anfitrión y presidente del CARI, Adalberto Rodríguez Giavarini, el vicecanciller Carlos Foradori, el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, el ex senador Eduardo Menem, los embajadores de Estados Unidos, Noah Mamet, Rusia, Victor Koronelli, Italia, Teresa Castaldo, Reino Unido, Marc Kent, y España, Estanislao de Grandes Pascual, entre otros diplomáticos, legisladores, dirigentes y empresarios.

Para Peña, la presidencia que la Argentina ejercerá del G20 en 2018 es una gran oportunidad «para mostrar una voz clara y unida al mundo» y consideró que el CARI puede ejercer «un rol absolutamente central» en transmitir ese mensaje.

«La realidad global no nos permite ser dogmáticos ni principistas, sino entender qué es lo que nos puede dar cada rincón del mundo. Tenemos que salir de la falsa dicotomía de integrarnos con uno o con otros», agregó en clara crítica a la política exterior del kirchnerismo.

El Gobierno sostiene que la incertidumbre respecto al futuro político del país es lo que más reparos genera en el mundo a definir inversiones en la Argentina.

En esa línea, Rodríguez Giavarini señaló, al brindar el discurso de apertura, que «con la colaboración de todos los sectores, la Argentina está dando un nuevo salto cualitativo en un mundo global y desafiante».

Tanto el presidente del CARI como el jefe de Gabinete destacaron la figura de Susana Malcorra, luego de su fallido intento de ser electa secretaria general de las Naciones Unidas.   En charlas privadas, la jefa de la diplomacia argentina confirmó que seguirá en el cargo hasta que Macri lo decida y que rechazaría eventuales ofrecimientos del flamante secretario general de la ONU, Antonio Guterres.