El diputado nacional de Juntos por el Cambio, Miguel Ángel Pichetto, y el senador Martín Lousteau reclamaron este jueves que el paquete de reformas incluido en el Decreto de Necesidad y Urgencia que lanzó el presidente Javier Milei pase por el Congreso «en forma de una ley espejo que pueda tratarse por capítulos», ya que actualmente su accionar «está fuera de la legalidad».

El legislador nacional consideró que, así como está, el decreto es propenso a ser cuestionado fuertemente en la Justicia, debido a que no está justificada la necesidad ni la urgencia que utiliza como ejes.

A su turno, el presidente de la Unión Cívica Radical, Martín Lousteau, se mostró de acuerdo con la idea de que en la Argentina deben reformarse diferentes cuestiones, «entre ellas el improductivo desempeño de partes de nuestro Estado y regulaciones que traban el buen funcionamiento de diversos sectores de la economía».

«Este DNU tiene 82 páginas con 366 artículos que derogan y modifican un sinnúmero de leyes y decretos. En el contenido del Mega decreto hay algunas iniciativas que pueden ser interesantes y otras irrelevantes para la agenda urgente. Otras pueden juzgarse como buenas, malas o realmente muy malas para las urgencias de la sociedad. Cada una de ellas merece un análisis riguroso e individual y para eso está el Congreso», enfatizó Lousteau.

El dirigente de la UCR explicó que los DNU no se pueden modificar, se aprueban o rechazan enteros, por lo que sería aconsejable que el mandatario nacional lo reemplace por una ley espejo que se pueda votar por capítulos y que convoque a sesiones extraordinarias para habilitar dicho tratamiento.

«Así las reformas positivas, que tendrán consenso, podrán sancionarse y las que no lo sean, evitarse. Toda otra alternativa, ya sea no hacer ninguna reforma o hacer las que no deberíamos, es mala para el presente y el futuro de los argentinos», aseveró el senador.

En esa línea, el integrante de la Cámara alta del Congreso instó a que los dirigentes y los militantes del oficialismo realicen el ejercicio de pensar cómo hubiesen reaccionado si un presidente del signo político contrario hubiera actuado de esta forma, «dictando un DNU fuera de la legalidad, tomando medidas económicas con fuerte impacto para amplios sectores y dando la espalda a la Asamblea Legislativa».

«Así no funciona una democracia plena», concluyó el senador nacional, una de las tantas voces que rechazaron las formas en las que el titular del Ejecutivo decidió proceder para impulsar su paquete de reformas.