La detención de Lázaro Báez está en el eje de la tormenta y las repercusiones de unos y otros no tardaron en aparecer. Así, políticos de distintos partidos opinan sobre el tema y expresan sus ideas al respecto.
La legisladora porteña por Confianza Pública y ex ministra de Salud durante el kirchnerismo, Graciela Ocaña, dijo tener «mucha expectativa» respecto de lo que pueda declarar el empresario Lázaro Báez porque «es una pieza central en este armado de sobreprecio por obra pública que termina con la familia Kirchner» y estimó que la situación judicial de la ex presidenta Cristina Fernández «está complicada».
«Esperemos que Báez diga lo que sabe, aporte todos los elementos de prueba y que se devuelva la plata que falta en muchos lugares de la Argentina, rutas, viviendas, educación», dijo Ocaña.
Habiendo sido una de las primeras denunciantes de la familia Báez, Ocaña estimó inevitable que la causa impacte sobre la ex presidenta al señalar que «está complicada porque parte de esta operatoria de lavado de dinero pasa por empleados que Báez contrataba por miles de millones de pesos». La operatoria que describió la ex diputada incluye el pago de obras «que ni siquiera se hicieron».
«Las facturas truchas que se encontraron en su empresa tienen que ver con generar los costos necesarios para poder negrear el dinero y devolverlo en una parte a los funcionarios que le prometieron esto y a la familia presidencial», aportó Ocaña.
Por último, la legisladora porteña opinó que el ex ministro de Planificación Julio De Vido «también va a terminar comprometido por varias causas, como la de Antonini Wilson, la compra de trenes, la tragedia de Once y el lavado de dinero».
Por su parte, el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, calificó hoy al detenido empresario de la construcción Lázaro Báez como «un personaje siniestro que tenía una directa relación con Néstor Kirchner».
Tal es así que, según relató Das Neves, el fallecido ex presidente «cuando dimos de baja una licitación de una empresa se enojó conmigo y me increpó por teléfono reprochándome que no tenía coraje para firmar una adjudicación que estaba con sobreprecios».
El mandatario patagónico recordó el episodio que se remonta a su primera gestión de gobierno durante la década pasada. «Me comuniqué con el entonces presidente Néstor Kirchner y le dije del sueño de tener la ruta 3 con una multitrocha entre Trelew y Puerto Madryn».
«Me dijo que lo iba a pensar y a los pocos días me volvió a llamar para darme la buena noticia de que se iba a hacer la obra y me recomendó que vayamos haciendo el proyecto porque le pregunté quién iba a hacer la licitación, si ellos o nosotros, y me dijo que la hagamos acá en Chubut, con vialidad provincial», recordó.
Al hacer un repaso de ese emprendimiento evocó que «la obra original era por casi 140 millones de pesos y estaba como favorita Kank y Costilla, de Lázaro Báez, pero el personal técnico de vialidad provincial con años en la evaluación de proyectos, observó un punto donde había un sobreprecio de 12 millones de pesos, es decir un 8 0 10 por ciento del valor de la cotización».
Repasó que «hubo una reunión muy dura con autoridades nacionales entre las que estaba (el ex presidente de Vialidad Nacional Nelson) Periotti, donde nos decían que se adjudique igual diciendo que los 12 millones era una estupidez, muy poca plata como para demorar una obra».
«Nos pusimos firmes y le dijimos que no y me acuerdo que no habrá pasado media hora de terminada la reunión y me llamó el ex presidente Néstor Kirchner cuestionándome con términos duros el por qué había bajado la licitación, le dije que había sobreprecio, me trató fuerte y cortó».
«Pero a los 20 o 30 días me volvió a llamar y me dijo que como no había tenido el coraje de licitarlo lo iba a hacer él, así que le mandé la documentación y se le adjudicó a Austral Construcciones que al igual que Kank y Costilla es de Lázaro Báez», sostuvo.
Das Neves ventiló además que «el precio ya no era de 140 millones de pesos sino de 308 millones de los cuales se pagaron cerca de 800 millones, se hizo el 60 por ciento de la obra y se inauguró dos veces por la ex presidenta aunque todavía está inconclusa».
Consideró que «esa obra constituye uno de los robos más emblemáticos en materia de obra pública y tengo el orgullo de decir que de mi lapicera jamás se firmó una obra para Lázaro Báez, lo que me costó el enojo presidencial y la desconsideración para mi provincia en materia de obras».
«Tengo forma de mostrar que gracias a Dios con este personaje siniestro siempre tuve una posición muy dura y no tengo ninguna duda que con la indagatoria de Báez esto irá para arriba porque no hay ninguna duda de la relación del empresario con Néstor Kirchner», agregó.
«Estoy dispuesto a declararlo ante la Justicia si me citan», afirmó el mandatario.
Reconoció que «muchos gobernadores tenían una disyuntiva porque desde nación le decían van 40 cuadras de pavimento pero tienen que adjudicarle a tal empresa y uno no sabía realmente qué hacer, si priorizar la obra que quedaría para siempre o rechazarlo y esa es la extorsión a la que estuvieron sometidos los gobernadores».
Das Neves consideró que «una de las principales cuentas pendientes que tiene la democracia en estos años es depurar la justicia, en la que creo como institución, aunque no en algunos de sus actores, porque durante décadas fue colonizada por amiguismos y parientes».
No obstante, la diputada nacional y presidenta del partido GEN, Margarita Stolbizer, afirmó hoy que, tras la detención del empresario Lázaro Báez, «habrá que relacionar las causas judiciales que vinculan sus negocios con los Kirchner» y afirmó que la Justicia «debe reparar con su acción tantos años de lentitud, desidia y complicidad».
«La detención de Báez forma parte del desfile de figuras con poder del gobierno anterior que deben empezar a rendir cuentas en los tribunales. Pronto habrá que relacionar las causas judiciales que vinculan los negocios de Báez con los negocios de los Kirchner», dijo Stolbizer a través de su cuenta de Twitter.
«La Justicia debe reparar hoy con su acción tantos años de lentitud, desidia y complicidad», concluyó Stolbizer.
Por último, Horacio Quiroga, que presidió tres de las empresas petroleras pertenecientes a Lázaro Báez entre los años 2009 y 2010, relató hoy que «los bolsos con dinero» que entraban a Austral Construcciones «no ingresaban en las cuentas» del empresario detenido ayer por orden del juez Sebastián Casanello en el marco de la causa por presuntas maniobras de lavado de dinero.
«Austral Construcciones se manejaba con plata no bancarizada. El dinero que venía en bolsos no ingresaba en las cuentas de Báez», contó hoy Quiroga en declaraciones a radio Nacional, en las que detalló cómo vio llegar bolsos con 7 millones de dólares a las oficinas de Austral Construcciones.
Según dijo el ex colaborador de Báez, «a las cuentas de la empresa que yo presidía no entró nunca esa plata» y su «preocupación» era saber «qué curso contable se le iba a dar al ingreso del dinero».
Quiroga explicó que, luego de que fue despedido de las empresas, pensó que «no se podía callar la boca sobre la existencia de ese dinero».
