El juez federal Daniel Rafecas ratificó que el Gobierno nacional no «tenía intención alguna de afectar o perturbar la labor de la Justicia argentina sino que era al contrario» en el caso Amia y aseguró que el fallo por el que desestimó imputar a la presidenta Cristina Kirchner lo realizó sin «presiones» y «convencido».

«En este caso estoy convencido que no hay absolutamente ninguna evidencia de que el Gobierno tuviera alguna intención de afectar o perturbar la labor de la Justicia argentina sino que era al contrario», enfatizó Rafecas.

El juez federal se pronunció así en declaraciones a la agencia internacional Reuters difundidas esta mañana por la TV Pública. «La evidencia presentada a este juzgado es exactamente opuesta a lo que sostenía (el fiscal Alberto) Nisman. En esas condiciones, yo lo que resolví fue que no es posible bajo ninguna circunstancia abrir una investigación penal», destacó Rafecas.

Al ratificar los términos del fallo que dio a conocer ayer, el juez señaló que «las órdenes de captura» de ciudadanos iraníes por la causa Amia «en definitiva nunca estuvieron en peligro».

«Se resolvió que no es posible bajo ninguna circunstancias abrir una investigación penal en estas condiciones», advirtió Rafecas.

El juez dijo que trabajó en los últimos días con una «asombrosa y pasmosa tranquilidad» y señaló: «Nadie ni de un lado ni del otro se ha acercado a hacer sugerencias o presiones».

«Trabajé absolutamente a conciencia», enfatizó Rafecas, quien sostuvo que el Gobierno nacional «siempre fue firme y consistente en sostener las órdenes de captura» de ciudadanos iraníes por lo que, interpretó, apostó a «lo que defendía (el fallecido fiscal Alberto) Nisman».

Señaló que «no hay ninguna evidencia que revele que el Gobierno argentino tenía alguna intención de perturbar, afectar o encubrir la labor de la Justicia argentina, si no que era al contrario».

«El Gobierno argentino agotó todas las instancias para lograr que la causa de investigación por el atentado a la Amia avance», agregó.

Por otra parte, desestimó la idea de que la denuncia presentada en su momento por el fiscal Nisman haya sido escrita por otra persona. «No tengo ninguna duda de que (la denuncia) ha sido escrita por el fiscal», dijo el juez.

Señaló que «hay una elocuencia y una manera de escribir forense que no me hace sospechar en absoluto de que haya sido obra o mano de otra persona».