Se inauguró el muelle de la Unidad VII del Puerto de Rosario, en la zona de Ayolas y el río Paraná. El acto, que se realizó hoy viernes 15 de julio, contó con la presencia del gobernador Miguel Lifschitz y la intendenta Mónica Fein, junto a las autoridades de Servicios Portuarios S.A y el Ente Administrador Puerto Rosario (Enapro)
«No puedo dejar de pensar la importancia de una ciudad, de una provincia que planifica y que fue planificando su desarrollo productivo, que fue combinando esa planificación para que creciera la ciudad y se reconciliara con el río para que también crecieran el puerto y la actividad productiva «, sostuvo la intendenta en el acto, destacando la importante inversión realizada para recuperar este importante muelle, que fue del orden de los 70 millones y estuvo a cargo de la empresa concesionaria.
«Es tiempo de recuperar la iniciativa. Necesitamos que el Puerto Rosario vuelva a ser, como hace 100 años atrás, el motor de desarrollo económico de la región, generador de empleo directo e indirecto. Santa Fe es una provincia claramente exportadora, que apuesta al comercio exterior. Somos la segunda provincia exportadora», comentó, Miguel Lifschitz, quien también ponderó la obra.
Por su parte, el presidente del Enapro, Angel Elías, dio precisiones en relación a la reconstrucción del sector. «La terminal de granos, que es la única de servicio público que funciona en el gran polo portuario de Rosario, inaugura una obra que le permite recuperar el muelle que desde el 2005 estaba inoperativo. Esto significa que la capacidad de carga de esta terminal va a ser el doble de la que tenía hasta el momento», manifestó.
Luego de las palabras de las máximas autoridades del poder ejecutivo local y provincial, los funcionarios y procedieron al tradicional corte de cinta que dejó inaugurado el muelle de la Unidad VII.
También estuvieron presentes en el acto el presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe, Antonio Bonfatti; el Diputado provincial Rubén Galassi; y el presidente de Servicios Portuarios S.A, Juan Manuel Ondarcuhu; entre otros.
La obra
Para la reconstrucción integral del muelle se incorporaron 42 pilotes de hormigón de 1,50 metros de diámetro y 36 metros de profundidad, además de 21 cabezales del mismo material, de 6 x 2,10 x 3,60 metros.
En total, se utilizaron 4.500 metros cúbicos de hormigón, 900 toneladas de acero en las armaduras y se colocaron seis bolardos nuevos para 60 toneladas y 22 defensas Dunlop A-500 R3. También se reconstruyó la red de incendio y se reinstaló la iluminación y el balizamiento de la zona.
