Un adolescente de 16 años fue golpeado por dos agentes policiales en el interior de la Dirección de Niñez de la ciudad de Rosario. El hecho se produjo en horas del mediodía cuando el chico intentó ingresar a la dependencia y fue detenido por personal policial que se encontraba vigilando el establecimiento.
Según el relato de uno de los trabajadores del lugar a Conclusión, a pesar de la negativa del personal, el joven logró adentrarse, sin embargo ya dentro del lugar fue interceptado por los policías. En ese momento se produce un forcejeo entre el chico y una de las agentes, quien comienza a golpear con las esposas al joven. A esto se suma su compañero, quien también utiliza este elemento para agredir al adolescente.
Conclusión dialogó con Laura Falbo, trabajadora de Niñez y representante de los empleados, quien confirmó el hecho y agregó: «El chico fue violentamente golpeado por la Policía. Una de las agentes tenía un golpe en la cara, que puede haber sido del joven, pero eso no justifica los golpes y el abuso de poder de la fuerza de seguridad«.
A su vez, contó que después, llegaron 20 policías e irrumpieron en el lugar empujando y gritando, con cascos y chalecos».
Luego del episodio, se le realizaron primeros auxilios al muchacho. El defensor Gabriel Ganón se apresentó en el lugar, sin embargo no hubo orden judicial de mantener demorado al joven, por lo que fue acompañado por empleados de Dirección de Niñez al Centro Cultural La Toma, donde el joven iba a participar en una de las actividades del centro.
«Esta es una réplica de lo que pasó otras veces ya. Y tiene que ver con la precariedad de las políticas de Niñez», comentó el trabajador del lugar. En este sentido, completó: «No hay lugar para alojar a los adolescentes, tienen que ir a hostels o pensiones», contó el empleado de Niñez.
A raíz del hecho, el Ministerio Público de la Defensa de la provincia de Santa Fe emitió un comunicado, que expresa: «Otra vez, en la Dirección Provincial de Promoción de los Derechos de la Niñez, Adolescencia y Familia sucedió un hecho por demás contradictorio y peligroso ya que debería ser ése el lugar donde tendrían que procurar que estas cosas no sucedan afuera y mucho menos adentro y, sin embargo, en el plazo de un mes ya fueron dos los episodios registrados».
