El detenido empresario Lázaro Báez se encontraba esta mañana, desde poco después de las 9, en la Alcaidía de los tribunales federales de Comodoro Py a la espera de ser traslado al juzgado a cargo de Julián Ercolini, ante quien presentará un escrito y pedirá la nulidad de la acusación en su contra en la causa por el presunto direccionamiento de las obras públicas de Santa Cruz en favor de las compañías de su grupo empresarial, cuya insignia es Austral Construcciones.

Se trata del mismo expediente en el que el lunes último fue indagada la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y ayer el ex ministro de Planificación Julio De Vido, Báez, quien dentro de tres días cumplirá siete meses de detención, fue trasladado esta mañana desde el penal de Ezeiza a bordo de un móvil del Servicio Penitenciario hasta la sede judicial del barrio porteño de Retiro y, poco después de las 9, se lo vio bajar protegido con un chaleco antibalas y casco.

Desde ese momento y hasta cerca de las 10.30 el detenido empresario santacruceño permanecía en la Alcaidía de los tribunales federales, ubicada en la planta baja del edificio ubicado en la avenida Comodoro Py 2002.

Su abogado Maximiliano Rusconi anticipó en declaraciones a la prensa que su defendido presentará un escrito en el marco de su indagatoria ante el juez Julián Ercolini y que, además, pedirá la nulidad de la acusación en su contra que pesa en el expediente que investiga el presunto direccionamiento de las licitaciones de obras públicas en Santa Cruz.

En el marco de esta causa, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner había asegurado el lunes último no ser «amiga ni socia comercial» de Lázaro Báez.

En tanto ayer, el abogado de tres de los cuatro hijos del empresario, Santiago Viola, dijo en declaraciones formuladas a una radio que existían «documentos concretos» que daban cuenta de que la ex mandataria y Lázaro Báez tenían «cosas en común».