El consejo directivo de la CGT recibirá por primera vez en su sede, este jueves, al ministro de Trabajo, Jorge Triaca, con quien procurará avanzar en el análisis de los temas conversados ayer en la cartera laboral, en tanto ratificó la convocatoria al Comité Central Confederal (CCC) para el 3 de octubre próximo en el sindicato La Fraternidad.

En un breve encuentro de conducción nacional, los 37 integrantes del consejo directivo obrero ratificaron la convocatoria al CCC para debatir «la histórica agenda de reclamos» -aunque todas las voces coincidieron en señalar que un nuevo paro fue por ahora descartado- y confirmaron que desde las 14 del jueves próximo, Triaca visitará por primera vez, como ministro, la sede gremial de Azopardo 802.

Los sindicalistas procurarán ese día avanzar con el funcionario laboral en el análisis de «la agenda de temas acordados en la reunión de ayer en Trabajo, en la que hubo varias coincidencias».

Lo anunció hoy en una rueda de prensa posterior a la reunión de consejo directivo el secretario Administrativo de la CGT y jefe del gremio de canillitas (Sivendia), Omar Plaini, quien también ratificó que desde las 11 del 3 de octubre se realizará el Confederal en la sede del Sindicato de Conductores de Trenes La Fraternidad, en Hipólito Yrigoyen al 1.800 del barrio de Congreso.

Plaini fue acompañado en la rueda de prensa por Juan Pablo Brey, secretario de Juventud y Protección de la Niñez de la central obrera y líder de los aeronavegantes (AAA), quienes confirmaron que el 12 de noviembre próximo llegará al país el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el exsindicalista británico Guy Ryder, para participar en Buenos Aires en la Cumbre Mundial contra el Trabajo Infantil.

Los dirigentes gremiales reivindicaron a Triaca como «interlocutor directo del gobierno nacional» y señalaron que de ninguna manera «se analizará la posibilidad de producir una reforma laboral».

«No se hablará de una reforma laboral, mucho menos al estilo brasileño, y tampoco sobre la posibilidad de flexibilizar los convenios colectivos. Esos son puros trascendidos que no figuran en agenda. Tampoco la CGT abandonará la histórica defensa del modelo sindical argentino, que es reivindicado en el mundo. Una de las prioridades será definir algunos temas respecto del sistema de obras sociales, que sostiene a 16 millones de personas», dijeron.

Los dirigentes también subrayaron que la central obrera continuará defendiendo «los derechos de los trabajadores»; indicaron que la CGT «está dispuesta a discutir todos los temas en una amplia mesa de diálogo» y puntualizaron que debe producirse «un consenso».

Plaini y Brey desmintieron también que en el encuentro de ayer con Triaca -o el próximo jueves- la CGT vaya a analizar los caminos de una reforma previsional y señalaron: «Ningún proyecto de ley en ese sentido ingresó aún al Congreso Nacional», a la vez que enfatizaron que, aunque luego de la marcha del 22 de agosto «se abrió otra vez el diálogo, se impone que produzca resultados».

«La CGT y su Confederal no descartan nada. Tampoco un paro, pero se abrió nuevamente un canal de diálogo y existe la esperanza de que prospere. La central obrera insistirá con su agenda histórica de reclamos y es cierto que hubo un acercamiento», expresaron.

Plaini y Brey señalaron que la CGT se opone de forma total a «las intervenciones y allanamientos a los gremios» y, en ese sentido, condenaron la acción judicial producida la víspera en el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), en tanto realzaron los convenios de libertad sindical aprobados por la OIT.

Por último y, al ser consultados sobre las preferencias dirigenciales respecto de su voto del 22 de octubre próximo, Plaini enfatizó: «La CGT no es el brazo político del sindicalismo peronista. Para eso existieron en algún momento las 62 Organizaciones Gremiales. La central obrera es y debe ser plural y expresa los reclamos de todos los trabajadores», concluyó.

Entre otros temas, la CGT y Triaca continuarán analizando este jueves en Azopardo al 800 «las coincidencias alcanzadas respecto de la necesidad de capacitación profesional y permanente de los trabajadores para que la tecnologí­a no los aparte del mercado laboral; el blanqueo de trabajadores informales; el funcionamineto de una agencia de tecnologí­a médica; un necesario debate con la Cancillería sobre las incidencias de los probables acuerdos comerciales con la Unión Europea (UE), y la normalización de los gremios intervenidos».