El tres veces primer ministro de Italia Silvio Berlusconi calificó hoy como «insostenible» la posibilidad de abandonar la zona euro, pese a que el referente económico de la Liga Norte (LN), una de las fuerzas aliadas de «Il Cavaliere» para los comicios de marzo, planteó que dejar la moneda común será «una cuestión de seguridad nacional».

«Matteo Salvini no tiene más la idea de salir del euro, entendió que sería insostenible para nuestra economía»; aseguró hoy Berlusconi en referencia a la orientación económica del principal referente de la LN.
Berlusconi y su partido Forza Italia (FD, Fuerza Italia) sellaron el domingo pasado una alianza electoral con miras a los comicios del 4 de marzo junto a LN, a los conservadores Fratelli d’Italia (FDI; Hermanos de Italia) y a un cuarto grupo que representará a independientes.

Las declaraciones de Berlusconi a Radio Capital contrastan con la afirmación que minutos después dio a RaiTre el responsable económico de la LN, Claudio Borghi.

«Un segundo después de que la LN se siente en el gobierno pondrá en marcha las posibles preparaciones para llegar a la soberanía monetaria. Es una cuestión de seguridad nacional», planteó Borghi.

Durante el encuentro del domingo, ninguna de las tres fuerzas principales de la coalición de centroderecha planteó la salida del euro como uno de los temas prioritarios ni la posibilidad de dejar la moneda común figuró en el comunicado conjunto que emitieron.

Además, luego del cruce entre Borghi y Berlusconi, el candidato a primer ministro del Movimiento Cinco Estrellas y vicepresidente de la Cámara de Diputados Luigi Di Maio ratificó la marcha atrás de su fuerza sobre la idea euroescéptica de algunos meses atrás.

«No creo que sea más el momento para Italia de salir del euro, porque la línea franco-alemana está más débil. Espero de no llegar a un referéndum sobre el euro porque sería un recurso extremo», planteó hoy Di Maio al programa de la RAI Porta a Porta.

Así, el candidato del movimiento centrista dio marcha atrás sobre la idea que su grupo había lanzado sobre lanzar una consulta no vinculante para que los ciudadanos italianos decidieran la permanencia en la moneda común.

Según diversas encuestas, la coalición de centroderecha lograría la primera minoría en las elecciones de marzo aunque por el momento lejos del piso de 40% que la ley electoral «rosatellum bis» exige para la formación de gobierno.

El otro gran bloque de la división en tercios que presenta hoy la política italiana, el oficialista Partido Democrático, se ha presentado siempre como la fuerza más proclive a permanecer en Europa y su secretario general Matteo Renzi había considerado a fines de 2017 que la propuesta del M5E de un plebiscito era «una locura».