Las firmas del ex presidente Néstor Kirchner habrían sido adulteradas en los libros societarios de la empresa Hotesur, de acuerdo a resultados de pericias caligráficas realizadas por orden del juez federal Julian Ercolini y que serían dadas conocer en los próximos días.
Los expertos Juan Santiago Rattaro de la Corte Suprema de Justicia; Alejandro Centofanti, de la Policía Federal; y José María Buitrago, propuesto por la defensa, habrían arribado el pasado viernes a ese resultado, de acuerdo a lo publicado hoy por el diario La Nación.
Según la publicación, el peritaje parecería confirmar la sospecha de la adulteración dolosa de los libros para justificar a posteriori negocios irregulares y un potencial lavado de dinero.
«Los expertos no precisaron si las firmas pudieron estamparse, todas con la misma birome, tras la muerte del ex presidente, en octubre de 2010», añadió la versión.
En julio el fiscal federal Gerardo Pollicita solicitó una pericia sobre los libros contables de la firma Hotesur, sociedad de la familia Kirchner, por presentar tachaduras, enmiendas y sospechas de falsedad de las firmas del ex presidente y sus hijos, Máximo y Florencia.
El libro contable de la firma Hotesur fue aportado por Romina de los Ángeles Mercado, sobrina de Cristina Kirchner y titular de dicha sociedad, el 14 de julio de 2015 en el juzgado federal 1 de Río Gallegos.
El día anterior, por orden del entonces juez del caso, Claudio Bonadio, la Policía Metropolitana había llegado a las puertas del domicilio ubicado en la Avenida Néstor Kirchner 496 en Río Gallegos, Santa Cruz, para realizar un allanamiento y retirarla documentación.
Según consta en el expediente, una persona que se identificó como Ángel Jesús Vázquez y dijo ser «abogado» de la empresa Hotesur, le indicó a los efectivos de la Metropolitana -luego de atender un llamado telefónico- que «por orden de la Presidenta» se haría llegar «toda la información» al Juzgado.
Así el allanamiento no se hizo y el libro contable de la empresa fue aportado al día siguiente en el Juzgado.
Tras ser corrido del caso Bonadio, su par Daniel Rafecas dispuso guardar toda la documentación en poder de Prefectura Naval, pero en noviembre de 2015 este último magistrado autorizó a los abogados de Mercado a realizar fotocopias del libro contable.
El 11 de noviembre de ese año, al reingresar los libros en poder de Prefectura Naval se detectó que los mismos tenían «enmiendas y tachaduras».
Al poco tiempo, tal cual se publicó en el Boletín Oficial, se registró cambio de composición de directorio de la firma Hotesur: Romina Mercado como presidente, Carlos Sancho y María Rocío García como directores titulares, y como suplentes, Emanuel Gómez, Florencia y Máximo Kirchner.
Pollicita pidió realizar estudio sobre «la totalidad de las inscripciones manuscritas» de los libros contables a partir del 7 de noviembre de 2008, en lo que hace a firmas, aclaraciones, enmiendas y otros.
En ese sentido, pidió determinar el contenido de las inscripciones originales que lucen en las hojas tachadas, tapadas con corrector líquido; y las firmas de Néstor, Máximo y Florencia Kirchner así como de los demás integrantes del directorio de Hotesur.
El fiscal reclamó que en caso de verificarse la falsedad se busque determinar si las mismas fueron realizadas por un mismo puño escritor y si existen desfasajes temporales entre la consignación de las inscripciones y las firmas que obras en aquellas actas.
