Alrededor del 45 por ciento de las mujeres argentinas no se realizan los chequeos rutinarios anuales, ignorando que la prevención puede salvarles la vida.

Por caso, las estadísticas ponen de relieve que 9 de cada 10 mujeres sobreviven al cáncer gracias a la prevención.

Estos números plantean una situación muy preocupante ya que muchas de las enfermedades que se pueden curar con un diagnóstico temprano, como el cáncer de mama y el de útero, son asintomáticas.

El científico e investigador, Roberto Rojas, fundador del centro Diagnóstico Rojas, con especialistas que trabajan en prevención destacó que los análisis que toda mujer se debería hacer una vez al año, previo a un control médico, son:

· PAP Papanicolaou.

· Mamografía digital y Tomosíntesis.

· Densitometría ósea.

· Estudio ecotomográfico ginecológico. .

· Ecografía de tiroides (con doppler color – Estudio de la vascularización).

Los controles mamarios clínicos se recomiendan hacer desde la pubertad y los análisis radiológicos por imágenes de la mama se solicitan a partir de los 40 años, siempre que no haya antecedentes familiares de cáncer pre menopáusico.

Rojas destacó que «todos los estudios mencionados, deben ir siempre precedidos de una consulta clínica e indicados por el médico».

«Las estadísticas hablan por sí mismas. Dejar pasar más de un año sin controles ni estudios en mujeres mayores de 50 años, es una enorme falla de la Medicina Preventiva y de la persona, sobre todo para el cáncer mamario», afirmó Rojas.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada ocho mujeres desarrollará cáncer de mama en algún momento de su vida, por otra parte, hay estadísticas que demuestran que en los últimos años aumentó la incidencia de la enfermedad en un 31% respecto de todos los tumores femeninos.