«Salió en brazos de uno de los integrantes de la otra familia que lo cuidaba, cuando nos vio, agachó la cabecita, miró quien estaba afuera y empezó a sonreír. Cuando me vio, me pidió upa y me empezó a tocar la barba como hacía siempre, luego la miró a Cristina le dijo !mami!», así describió Sergio Gigliotti el momento del reencuentro con Kiki luego de haber estado separados por cuatro meses.
Sergio Gigliotti y Cristina Morla lucharon incansablemente para recuperar a Kiki, -el nene de tres años al que habían cuidado durante casi dos años- y porque se cumplan sus derechos. Ayer, una resolución judicial los favoreció y el niño regresó a la casa de la familia que el adoptó como sus padres.
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«Fue muy especial, íbamos con la intensión de verlo pero preparados por la posibilidad de que esté enojado con nosotros porque podría creer que lo habíamos abandonado y más, que no tuvimos tiempo de prepararlo siquiera, pensamos que iba a estar muy enojado, pero no. Cuatro meses no alcanzaron ni para que se enoje. No hace falta una cámara Gesell ni nada que se le parezca para ver lo que siente Kiki por nosotros, quedó demostrado ayer», manifestó emocionado Sergio. 
Si bien, la felicidad es indescriptible, -como expresó Sergio- todavía falta un paso más y es la adopción plena de Kiki y su hermanito.
«Hay que seguir luchando, pero con el acá es menos doloroso«
En diálogo con Conclusión, Sergio reafirmó su intensión de adoptar al hermanito de Kiki y afirmó que «estuvo siempre presente» desde el momento en que se enteraron de su existencia.
«En octubre del 2017 pedimos la guarda pre adoptiva de Kiki, en ese momento no sabíamos que tenía un hermanito y cuando nos enteramos, nos pareció lo más lógico hacer el pedido de guarda para los dos», señaló el Papá Solidario.
Este martes, tras un arduo proceso que incluyó numerosos pedidos, la justicia falló y la Sala Segunda de la Cámara de Apelación en lo Civil y Comercial resolvió a favor de la apelación que había presentado el defensor general —cuyo pedido inicialmente había sido rechazado por el tribunal de primera instancia— y decidió restituir el menor a la pareja.
El fallo, que tuvo la firma de los jueces Eduardo Sodero, Luciano Pagliano y Armando Drago, sostuvo -entre otros argumentos- que a riesgo de reiterar “verdades simples u obvias” el caso pone plenamente en juego el mandato convencional y legal de dar primacía al interés superior del niño, “directiva que se torna particularmente exigente cuando se trata de niños que están en su primera infancia, un período esencial para la realización de los derechos del niño pues allí se sientan las bases de su salud física y mental, de su seguridad emocional y de su identidad cultural”.
En el escrito también hubo serias críticas a la actuación de la Subsecretaría de los Derechos de la Niñez y Adolescencia de la provincia, que, de acuerdo a lo informado por el ministro de Desarrollo Social de la provincia, Jorge Álvarez y por decisión del gobernador Lifschitz, no apelarán el fallo.
«Kiki no tuvo la oportunidad de tener una abogada del niño, que es lo que establece la ley. La tuvo pero la jueza la recusó el 16 de febrero, esa abogada tendría que haber hecho lo que hicimos nosotros, hacer que Kiki sea escuchado. Vamos a seguir defendiéndolo como lo hicimos hasta ahora, porque el nos enseñó todo eso«, remarcó Sergio.
Y agregó: «Ahora viene lo de fondo, que es la adopción y va a pesar mucho el vínculo que hay. Mas allá del dolor que sentimos cuando nos alejaron del nene y todo esto que hicimos, sabíamos que no estábamos equivocados, sabíamos que a Kiki se le habían violado sus derechos».
En ese sentido, el periodista afirmó que la semana pasada se presentó un escrito en la Corte Suprema de Justicia firmada por 30 legisladores nacionales para que se respeten los derechos del niño, además de la Defensoría del Pueblo de la Nación que también se adhirió al pedido.
«Nosotros siempre decimos que si hubiese sido Kiki solo, el dolor hubiese sido el mismo, habríamos peleado igual, pero hubiese sido un error. Aquí lamentablemente, hay mucho chicos en la misma situación, nosotros creemos en las causalidades y no las casualidades. Hay que seguir luchando, pero con él acá es menos doloroso«, concluyó.
