Un profesor que fue despedido por afiliarse al sindicato docente (Sadop) deberá ser indemnizado por su empleador. El fallo fue dictado por la jueza María Andrea Deco, del juzgado laboral N° 10.
Se trata de José Agostini, que fue cesanteado en 2014 del Instituto TEC, gestionado por la Fundación Educativa del Interior luego de que tomaran conciencia de su actividad gremial. El profesor se afilió a Sadop Rosario y reclamó que se le paguen vacaciones, aguinaldo, horas cátedra reales que trabajaba y antigüedad.
A raíz de esta demanda, la patronal lo despidió “sin causa” y además comenzó una persecución contra aquellos maestros que adoptaran la misma postura. Además, Agostini señaló que había «determinados datos que conspiraban contra sus derechos como trabajador».
Ante esta situación, Agostini presentó el hecho en la Justicia y solicitó la “reinstalación en su puesto de trabajo” por considerar discriminatoria la decisión. Junto con el pedido, el docente denunció irregularidades laborales como la antigüedad, el imcumplimiento de los salarios, los aguinaldos fuera de término y los preavisos omitidos.
En tal sentido, la magistrada María Andrea Deco falló a favor y si bien no habilitó que vuelva a su puesto de trabajo, condenó la Fundación Educativa del Interior a pagar al profesor “una indemnización agravada por discriminación”. Esto sumado a los salarios caídos, aguinaldos, antigüedad y preavisos omitidos.
Tras el fallo—que se conoció la semana pasada— la institución tiene cinco días para abonar la indemnización; aunque puede ser apelada.
