En el operativo de este fin de semana, intervinieron varias dependencias del Ejecutivo local junto a personal de la Unidad Regional II de la Policía provincial. Los agentes instaron a unos 300 asistentes al local a que se retiraran, detuvieron al responsable del comercio y procedieron a decomisar equipos de música.
Hay que recordar que en enero pasado, la Municipalidad dispuso el cierre definitivo del bar Junior, al que calificaron como uno de los más conflictivos de la ciudad. Esto ocurrió, luego de que el Tribunal de Faltas decretara la caducidad de la habilitación por tergiversación de rubro: el negocio estaba inscripto como bar pero difundía música fuera de horario.
Además, no sólo fue eso lo que acumuló quejas y denuncias de los vecinos: el 8 de enero pasado, en las inmediaciones del local se produjo un tiroteo que dejó como saldo un herido.
En este sentido, el responsable del local fue detenido y trasladado a la Comisaría 6ª, en la cual quedó a disposición de la Justicia para realizar las investigaciones pertinentes.
Del operativo de desalojo participaron agentes de la Dirección General de Inspección de Industria, Comercio y Servicios y de la Guardia Urbana Municipal (GUM), acompañados por efectivos de la comisaría 6ª a cargo de Julián Jiménez.
“Pudimos intervenir a fin de hacer cumplir con la caducidad de la habilitación de este comercio que no ha respetado las normas que regulan la noche en la ciudad”, refirió tras el procedimiento Gustavo Zignago, a cargo de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana de la Municipalidad.
