El 69% de los brasileños considera malo o pésimo el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, quien enfrenta un juicio político en el Congreso que puede destituirla del cargo, de acuerdo a una encuesta realizada por el instituto Ibope encargada por la Confederación Nacional de la Industria (CNI).
El sondeo indicó que el número de los que evalúan en forma negativa la gestión de Rousseff cayó del 70% en diciembre al 69% en marzo, mientras que quienes le dieron el visto bueno al gobierno subieron del 9% hacia el 10%.
El dato novedoso que ofrece esta encuesta indica que el 82% de los entrevistados rechazó el estilo de comandar al país de la mandataria, cuya popularidad se fue derritiendo al calor de las crisis por corrupción, política y económica desde que fue reelegida en octubre de 2014.
Y además, Ibope consultó a los brasileños sobre cómo percibe la difusión de las noticias sobre el gobierno: subió del 75% al 76% el número de los que creen que hay más noticias negativas, contra el 10% que cree que existe una agenda positiva.
La política pública que sufrió mayor desaprobación fue la lucha contra el desempleo: en diciembre era el 87%, ahora es del 86%.
La noticia más recordada por los consultados en las encuestas, con 31%, fue la designación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva para ser su jefe de ministros, el 17% apuntó las manifestaciones opositoras a favor del juicio político y el 13% dijo que fue la marcha de la investigación por corrupción de la Operación Lava Jato.
La encuesta fue realizada entre el 17 y el 20 de mazo en 142 municipios con un margen de error de 2 puntos porcentuales, en medio de las protestas opositoras frente al Palacio del Planalto por la designación de Lula, que aún debe ser ratificada o rechazada por el Supremo Tribunal Federal.
