El Día del Niño por Nacer se celebra cada 25 de marzo, desde hace más de tres décadas, en coincidencia con la fiesta litúrgica de la Anunciación a la Santísima Virgen María. Esta efeméride tan popular en Latinoamérica tiene como principal objetivo reflexionar sobre el valor supremo de la vida humana desde la formación del embrión en el vientre materno. La fecha se recuerda con declaraciones, reflexiones pastorales y marchas, para manifestar públicamente que «toda vida vale».

Por su parte, el Secretariado Nacional para la Pastoral del Cuidado de la Vida Naciente y la Niñez de la Comisión Episcopal para la Vida, los Laicos y la Familia (Cevilaf), se une al Día del Niño por Nacer, “para conmemorar, promover y defender la vida humana desde que fue concebida en el vientre de la madre”.

El organismo episcopal destaca que en función de “la firmeza de los principios de la ciencia y, sobre todo, en el testimonio que estamos llamados a dar como cristianos, somos anunciadores gozosos del valor de la vida desde la concepción», y sostiene: «Toda vida es única, y especialmente la que crece en el seno materno, la que se debe cuidar con especial atención”.

En conmemoración del Día del Niño por Nacer, que se celebra el 25 de marzo, un gran número de personas se movilizó en la Ciudad de Buenos Aires el sábado 23 por la tarde, con un recorrido con clima festivo desde Plaza Italia hasta la Plaza Rubén Darío, frente a la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, para pedir por la defensa “de las dos vidas».

Se celebra cada 25 de marzo, en coincidencia con la fiesta de la Anunciación. La fecha se recuerda con declaraciones, reflexiones pastorales y marchas, para manifestar que "toda vida vale".

El mismo escenario se replicó en el interior, donde centenares de manifestantes marcharon en las capitales de provincias como Mendoza, Córdoba, Tucumán, Tierra del Fuego, entre otras, por la misma causa. En Rosario, se llevó a cabo en las peatonales Córdoba y San Martín, y se hizo una jornada solidaria de recolección de pañales.

La concentración en Buenos Aires había sido convocada días atrás por organizaciones provida. Con carteles y pancartas que solicitaban la derogación de la ley del aborto legal, seguro y gratuito, y varias banderas argentinas, los participantes lucían prendas de color celeste y pañuelos del mismo color, característico del movimiento. También portaron miniaturas de bebés y fetos, tal como se vio en marchas pasadas.

Los manifestantes llegaron hasta un gran escenario montado frente a la Facultad de Derecho de la UBA, donde distintos oradores recitaron sus discursos ante el vitoreo de la gente. Entre ellos, estuvo el padre Fabián Barrera, quien bendijo a las embarazadas y demás madres presentes. “Esto no es una lucha solo de la Iglesia Católica, sino también la de todos aquellos que, aun sin ser creyentes pero dejados guiar por su recta conciencia, defienden el don de la vida; y la Argentina es un país que ama la vida”, expresó.

Desde el escenario se leyeron, además, las estadísticas de los últimos años: 73.487 abortos en 2021 y 96.666 en 2022. “Estas solo son las cifras que aportó el sistema público, no tenemos la información de los servicios privados, algo que no me quiero ni imaginar”, explicó uno de los organizadores.

Por su parte, la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera) cree que la conmemoración del Día del Niño por Nacer, brinda «una oportunidad invaluable para reflexionar sobre el valor supremo de la vida en gestación».