Tras el derrumbe ocurrido en calle Francia al 1100 y en un panorama donde son recurrentes los incidentes que se producen en la construcción de obras, la concejala de Iniciativa Popular, Fernanda Gigliani, presentó dos proyectos: uno pretende crear un Registro de Constructores Infractores dirigido a Empresas Constructoras y Contratistas de Obras Privadas.
“El Registro se incorporará al actual Reglamento de Edificación de Rosario, y funcionará dentro del ámbito de la Dirección General de Obras Particulares de la Municipalidad”, explicó la edila.
“Proponemos este Registro, para que quienes quieran contratar un profesional o empresa con el fin de ejecutar una obra, como así también quienes quieran invertir en la construcción, puedan consultarlo e informarse sobre la responsabilidad e idoneidad del profesional o la empresa según los antecedentes de los que daría cuenta este registro, donde constarían los apercibimientos y sanciones recibidas.»
El otro proyecto plantea que la Contratación de Seguro de Responsabilidad Civil en obras de construcción y demolición, se haga por un monto que no podrá ser inferior al 10% del plan de inversión del proyecto, cuya actualización quedará sujeta al índice de la Cámara Argentina de la Construcción, nivel general tomando como base diciembre del año en curso.
“La idea es que se pueda determinar el alcance de la suma asegurada para que guarde relación directa con el monto del proyecto inmobiliario y su plan de inversión” detalló Gigliani. “De este modo se protegen los derechos de los vecinos, frente a los eventuales daños y perjuicios sufridos en su propiedad, a causa de la obra en construcción o demolición en un inmueble lindero”.
Origen de las iniciativas
En febrero de este año una casa quedó reducida a escombros, como producto de un incidente ocurrido en la construcción de una obra lindera. Luego de lo ocurrido, los vecinos afectados fueron recibidos por Fernanda Gigliani: “Estas iniciativas surgen a raíz de la situación que padece la familia que sufrió el derrumbe de su casa en Francia al 1100. Son 5 personas que quedaron en la calle. Primero se vieron obligados a abandonar su propiedad, y después otra vez quedaron en la calle porque la constructora responsable del daño solo les pagó 6 meses de alquiler de un hotel”.
Lo que aprobó y lo que NO aprobó el Concejo
A raíz del encuentro entre Gigliani y la familia de Rosa Zaitune, una de las damnificadas por el derrumbe, la concejala presentó un proyecto, del cual se aprobaron sólo algunos artículos: un pedido de informe sobre las condiciones de la obra y las intervenciones que la Municipalidad realizó frente a las denuncias de los vecinos; sumada también una inspección.
Al respecto, Gigliani expresó: “Esperábamos que se apruebe el proyecto original, que contemplaba el pedido de suspensión de la obra. Lamento que este Concejo no entienda que hoy una suspensión puede ser la única herramienta con la que cuentan los vecinos, frente a la desidia, negligencia e impericia de empresas constructoras, y al desamparo alevoso de una intendencia que no hace más que dar la espalda a la vulnerabilidad de los rosarinos”.
