Por Alejandra Ojeda Garnero

La ola de inseguridad azotó la ciudad en los últimos años con una crudeza inusitada. Pero distintas fuentes del Ministerio de Seguridad provincial auguran que en los próximos meses la sociedad comenzará a sentirse más segura.

No es fácil hablar de estadísticas cuando familias quedaron destrozadas por la pérdida de un ser querido en un hecho de inseguridad, pero los datos duros indican que el delito bajó y desde la cartera de Seguridad provincial, Luis Persello, subsecretario de comunicación estratégica, en diálogo con Conclusión aseguró que se debe a «un plan estratégico que puso en marcha la actual gestión del ministro Maximiliano Pullaro».

Este plan tiene que ver con el mapa del delito y el sistema de cuadrículas que permite tener un patrullaje estable en la ciudad “por capas”. Las capas consisten en un sistema que tiene un total de 100 móviles estables patrullando la ciudad y una segunda capa con 50 móviles más, que se suman en un trabajo coordinado si la situación lo requiere.

Los delitos más sensibles para la sociedad son los homicidios, las entraderas y robo a mano armada, por la violencia que descargan los delincuentes sobre sus víctimas. Según las cifras oficiales, que comprenden todos los casos denunciados, hasta el 20 de diciembre se produjeron 174 homicidios, un 23,21 por ciento menos que en 2015 (224), sin embargo de ese total y a diferencia de la sensación de la sociedad, 13 ocurrieron en ocasión de robo, el resto de los asesinatos se produjeron por otras circunstancias, como problemas interpersonales, intrafamiliares o ajuste de cuentas.

Por otra parte, este año disminuyeron las entraderas en un 42,51 por ciento con un total de 284, mientras que en el 2015 la cifra por este delito ascendió a 494. Es importante aclarar que este tipo de robo tiene una escasa cifra negra ya que la mayoría de los casos son denunciados por sus víctimas. Esta cifra indica que se produjeron un promedio de 23 entraderas al mes durante el 2016.

Otro delito que sensibiliza a la sociedad es el robo a mano armada (calificado). En lo que va del año se registraron 5.325 casos, un 36,33 por ciento menos que en 2015 cuando la cifra trepó a 8364 robos.

Uno de los delitos que se mantiene respecto de años anteriores es el escruche a viviendas y comercios, ya que solo disminuyó en un 3,72 por ciento con 284 casos denunciados contra 295 que ocurrieron en 2015.

Según las cifras oficiales, el robo a taxistas bajó sensiblemente en el último semestre. En lo que va del 2016 se registraron 195 hechos lo cual representa una baja del 32,49 por ciento respecto del 2016 en el que la cifra ascendió a 437 casos.

La cantidad de vehículos sustraídos ascendió en el 2016 a 1.957 mientras que fueron recuperados un total de 701 unidades, un delito que se mantuvo respecto del año anterior con 1789 unidades sustraídas y sólo 309 recuperadas. Este delito está asociado a la venta ilegal de autopartes y desarmaderos ilegales.

Un total de 357 casos de abuso de armas se contabilizaron durante el 2016. Este tipo de delito implica la utilización de un arma sin ocasionar mayores daños. Descendieron en un 20 por ciento en relación al 2015 donde se produjeron un total de 446 hechos con estas características.

La sociedad se conmovió este año con hechos cometidos por personas condenadas que gozaban de salidas transitorias o libertad condicional, como ejemplo se puede citar el asesinato del suboficial Mauro Mansilla el 9 de marzo cuando intentó capturar a Ricardo Albertengo tras el pedido de ayuda de una pareja que había sido víctima de un robo en su comercio, por el mismo autor. Otro caso fue el de Fabricio Zulatto quien apareció muerto con un disparo en la cabeza enterrado en un pozo de zona norte y luego se determinó que el autor intelectual del crimen fue Andrés Soza Bernard quien gozaba que gozaba de libertad condicional por una condena por matar a su novia en 2008, contrató a un cartonero para zanjar viejas diferencias con el chico. Si bien esos son los casos más emblemáticos de este año, existen un sinnúmero de personas con distintos requerimientos de la justicia que se encuentran prófugos y sobre los cuales pesa pedido de captura.

En este contexto, desde el ministerio de Seguridad remarcaron que en lo que va del año fueron recapturadas 1.136 personas que contaban con pedido de captura activo por distintos motivos, entre los cuales se pueden mencionar la violación de arresto domiciliario, no haber regresado de una salida transitoria o haber cometido algún tipo de delito y estar prófugo de la Justicia.

Con estas cifras, desde el Ministerio de Seguridad manifiestan que el “esto es un balance de la situación, de dónde estamos parados. No está todo bien, porque es muy difícil hablar de números fríos cuando hay víctimas, una familia que sufre y los daños son irreparables”, indicó el vocero de la cartera.

Sin embargo, aseguran que “los hechos se deben a una violencia estructural que se trata de mejorar con políticas que permitan que la gente se sienta más segura”.

En este sentido, “la meta de la gestión es recuperar la presencia policial en la calle. Los números de delitos se redujeron. Estamos conformes con el trabajo que se está haciendo pero no afirmamos que está todo bien”.

Con este marco el vocero del Ministerio aseguró que para lograr mayor seguridad se implementaron nuevas políticas de seguridad que tienen que ver con “la presencia estable de 150 patrulleros en las calles y la meta en 2017 es llegar a 200 móviles”.

Por otra parte, señalan como un dato positivo “haber desarticulado tres bandas que se dedicaban a cometer entraderas, una banda que azotó la ciudad con innumerables secuestros virtuales, no se registraron más robos a heladerías y bajó considerablemente el robo a taxis”., aunque a la vez puntualizó que la mayor preocupación del Ministerio son los escruches que aumentan sensiblemente en el período de vacaciones, para lo cual establecieron una serie de recomendaciones”.

Dentro de este contexto, señaló que “estamos conformes con el trabajo que venimos haciendo pero no con los números del delito”, concluyó.