Diego Armando Maradona vivió una situación incómoda anoche en el aeropuerto de Ezeiza al ver frustrada su intención de regresar a Dubai cuando le comunicaron que su pasaporte figuraba como «robado».

Luego de infructuosos trámites, Maradona tuvo que retirarse del aeropuerto y especuló con la posibilidad de que su inconveniente haya sido orquestado «por algún político».

El ex 10 de la selección había llegado al aeropuerto acompañado de su pareja Rocío Oliva, horas después de su reconciliación con quien para la Justicia italiana es su hijo, Diego Sinagra, y tras sortear el cordón periodístico se dispuso a abordar el avión que lo iba a llevar al país árabe que es su actual sitio de trabajo. Sin embargo, la Aduana impidió que pueda concretar el viaje que tenía previsto.

«Señor, su pasaporte está denunciado por robo. No puede viajar», le comunicó un agente aduanero, por lo que el ex futbolista se comunicó con su abogado Matías Morla y tras varias gestiones, resignado, tuvo que pasar una noche más en Nordelta.

«No voy a dejar que nadie maneje mi vida. Desde los 15 años hago lo que quiero y nadie va a venir a decirme lo que tengo que hacer. Es un disparate la denuncia por robo de un pasaporte que tengo en mi mano», expresó Maradona a Diario Popular.

Desde el entorno de Diez sospechan que todo esto es una venganza por sus últimas opiniones políticas y aseguran que le están pasando una factura.

«Nosotros jamás denunciamos la pérdida del pasaporte, de hecho Diego lo tenía en sus manos. Es muy raro lo que pasó en Ezeiza y sobre todo porque no es la primera vez que Maradona viaja al país. Vamos a investigar para saber qué pasó y sobre todo quién se tomó el tiempo de denunciar algo que nunca se perdió», expresó por su parte Morla.

En cuanto a las especulaciones políticas, el letrado sostuvo: «La verdad es que no me consta, yo no lo puedo unir con las opiniones políticas de Diego y de existir un vínculo en ese sentido sería muy peligroso. La verdad es que es muy llamativo lo que pasó».