Por Candelaria de la Cruz

Martha Pelloni, quien desde hace más de 20 años mantiene una intensa actividad social, denunció el uso de agroquímicos en las zonas rurales del norte del país y afirmó que “los intereses por parte del poder judicial son muy fuertes”.

Pelloni actualmente coordina la “Red Nacional de Infancia Robada”, conformada por Foros Sociales en la defensa, capacitación y asistencia a víctimas de tráfico y trata de personas, abuso infantil, explotación sexual infantil y adicciones.

La red recibe día a día denuncias de niños a los cuales, entre las problemáticas tratadas, se encuentran las consecuencias por el uso de agroquímicos en diferentes provincias y en especial en la provincia de Corrientes, donde actualmente reside.

“Recibimos numerosas denuncias por las consecuencias que traen las fumigaciones en las zonas rurales. Hidrocefalias, leucemias y malformaciones, son muchísimos los casos”, contó en dialogo con Conclusión. agrotoxicos

Entre los años 2011 y 2012, tres niños resultaron con graves problemas en su salud como consecuencia del uso de un agroquímico altamente tóxico que se encontraba prohibido en todo el país. Uno de ellos falleció y dos niñas quedaron con secuelas graves.

El niño fallecido, Nicolás A., vivía junto a su familia a 15 metros de una plantación de tomates, en la que se realizaban fumigaciones habitualmente y el 1º de abril del 2011 él y su prima, Celeste, se enfermaron y tuvieron que ser hospitalizados.

Años más tarde, en noviembre de 2016, se llevó a cabo el juicio oral y público y el 8 de diciembre Nicolás Pietro, el productor encargado de dicha práctica, fue sobreseído.

En ese sentido, la monja contó: “La gente adinerada y entre ellos el poder judicial, todos tienen campos. Unos de los jueces del tribunal que sobreseyó a Prieto (el productor), tiene campos justamente cerca de ahí de ese lugar”.

Y remarcó: “Hay intereses muy fuertes detrás de todo esto, sino ya tendríamos leyes. Los médicos de Córdoba que tienen grandes problemas con este tema, nos han dado una mano muy grande y fueron amenazados de muerte”.

Además, Pelloni afirmó que las malformaciones en los chicos son constantes y que los médicos del lugar “ya no quieren operar porque están cansados que no se tomen medidas”.

En este caso y en otros, se encuentran trabajando profesionales y especialistas de todo el país, pero tal como cuenta la religiosa, “lo corporativo, los intereses de los productores y de los jueces manejan todas las decisiones”.

Pelloni se hizo conocida públicamente en los años noventa por organizar marchas contra la impunidad del crimen de la joven catamarqueña María Soledad Morales, quien era su alumna en Catamarca y desde ese momento dedicó su vida luchar por causas sociales.

Niños desprotegidos….

Por otro lado, Pelloni se refirió a la situación de los niños y aseguró que “están muy desprotegidos”.

 “En Goya (Corrientes) recibimos diariamente denuncias por problemas de abuso sexual doméstico. Ese tema es un problema cultural pero por el cual no se hace nada por revertir la situación, se convierten en chicos estigmatizados de por vida”, señaló.

Además, aseguró que los centros de atención que dependen del Estado “son muy pobres” y que no hay un acompañamiento de dinero suficiente para pagar a profesionales y poder fortalecer las instituciones.

“No hay partidas presupuestarias para todo lo que es niñez. Además, los psicólogos y los juzgados de familia atienden sólo 5 o 10 minutos y no sé ve el progreso. Nosotros desde nuestra organización le estamos dando una mano al juzgado de familia”, indicó Pelloni.

Y finalizó: “Ellos nos mandan la gente a nosotros. Es una vergüenza que el Estado no haga nada por cumplir con la Ley 26.071 y que ahora en forma de colectivo, las organizaciones que nos dedicamos a niñez estamos tratando de influir en el gobierno para que haya un defensor del niño”.

La madre Pelloni comenzó su actividad pastoral en 1992 luchando contra la venta de bebés, que en ese momento era “un gran comercio” y aseguró que la situación “no ha cambiado nada”.