El presidente de la Cámara de Industriales Metalúrgicos de Esperanza, en el departamento Las Colonias, Alberto Balangione, expresó la preocupación del sector por la escasez de trabajo y por las altas tasas del sistema financiero.

Balangione manifestó que «nuestro sector logró un acuerdo paritario del 35 por ciento de incrementos salariales» pero estamos preocupados “no tanto por estos aumentos sino por no tener trabajo suficiente» y aseguró que ”necesitamos un sistema financiero acorde para poder seguir adelante».

En declaraciones a Télam, Balangione explicó que esa cámara se agrupó con la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra), con 19 integrantes.

«Estamos muy preocupados «porque no tenemos la cantidad de trabajo suficiente para seguir afrontando el trabajo de la gente y los aumentos acordados” indicó y agregó que «hay sectores que no están tan mal pero otros que están muy complicados, y esa es la realidad más allá del porcentaje concreto de incrementos salariales”.

«Ahora tenemos que atacar los problemas de fondo, que son las Lebac (Letras del Banco Central) con sobreprecios, a tasas del 35 o 36 por ciento de intereses que a nivel mundial nadie paga”, resaltó.

“Esto compite con el sector industrial porque quien quiere hacer una inversión, por ejemplo para comprar máquinas, mira al sector financiero y a esa timba financiera como una cuestión muy atractiva porque pone su plata de la inversión ahí, pero mientras tanto hay que pagarle el sueldo a la gente”, puntualizó.

«Mientras tanto las empresas están pagando descubiertos de alrededor del 45 al 50 por ciento, con créditos –salvo los que están a tasa subsidiada- que están por encima del 50 por ciento. Esto es un certificado de defunción para las pymes porq «También hay muchas empresas que trabajaron para el sector público, que se las auditó, se revisó lo que facturaban, pasaron todo el ciclo pero no están cobrando los bonos de bienes capital”, dijo Balangione.

Finalmente, acotó que “cobrar eso es una inyección de oxígeno pero no es lo que dará la perspectiva a futuro, esa perspectiva es hoy tener un sistema financiero acorde porque tenemos competencia con Brasil con un precio de insumo en chapas de un tercio de lo que pagamos nosotros y un costo de mano de obra de un medio de lo que pagamos nosotros, lo que da como resultados equipos al 40, 50 ó 60 por ciento por debajo de lo que podemos vender nosotros”.