Una joven que se encontraba presenciando un espectáculo en el bar La Chamuyera, fue golpeada por una botella que arrojaron desde un edificio vecino al patio del mismo, y se encuentra internada en grave estado,

La chica, de 24 años de edad sufrió un traumatismo de cráneo con fractura por hundimiento de los dos parietales, y está siendo intervenida quirúrgicamente en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez

Según Néstor Marchetti, director del efector, se trata de «un importante trauma cerebral y no se puede adelantar pronósticos». Señaló además que es necesario esperar a ver como evoluciona a partir de la operación y que el estado de la joven es crítico.

Este grave episodio se da en el marco de un conflicto que el bar cultural La Chamuyera tiene con algunos vecinos de edificios cercanos. Desde el boliche ya habían realizado varias denuncias de episodios similares.

En un comunicado difundido por la agrupación que nuclea a los espacios y bares culturales de la ciudad, el Ecur (Espacios Culturales de Rosario) que firman además concejales de los bloques de Ciudad Futura, Frente Social y Popular, Iniciativa Popular y Radicales Progresistas, se afirma que: «Este hecho no es nuevo, los ataques contra los clientes  y la gente que pasa por la vereda están sucediendo desde marzo, y fueron presentadas desde La Chamuyera ocho denuncias efectuadas en fiscalía, tomadas por el fiscal Cimino, varias de ellas desestimadas por falta de víctimas, además de comunicados a distintos medios de la ciudad. Las denuncias de este hecho en particular fue realizada en el día de hoy también en fiscalía».

En el comunicado se señala además que desde el Ecur se dio aviso a distintos entes estatales de los que estaba ocurriendo sin obtener soluciones o respuestas de ninguno de ellos.

Quienes integran el espacio de los bares culturales reclaman «una urgente respuesta desde el Estado» y demandan que»se hagan cargo del hecho». «Están en juego vidas humanas. Pedimos que se investigue y se determinen los responsables de este hecho puntual, exigimos justicia. Así como también insistimos en que los espacios culturales seamos reconocidos legalmente, sin una figura que nos incluya es mucho más fácil para el Estado no hacerse cargo de estas situaciones», enfatiza el Ecur al cierre del documento.

«Se trata de una persona que arroja objetos contundentes con el fin de dañar a la gente»