Al menos 200 personas fueron arrestadas y cerca de medio centenar de policías resultaron heridos anoche en Túnez, durante una nueva ola de protestas contra los recortes, la inflación y el alza de impuestos decretados por el gobierno de Youssef Chahed, que busca bajar el déficit y complacer las exigencias del FMI.

En Ben Arous, cerca de la capital, un grupo de personas asaltó y saqueó un supermercado antes de que lograran a intervenir las fuerzas de Seguridad.

En un vídeo que circula profusamente en las redes sociales, se observa cómo decenas de personas salieron de la tienda con todo tipo de productos, desde alimentos hasta aparatos de electrónica.

Las autoridades recomendaron a los comerciantes adelantar dos horas el horario de cierre de las puertas de sus establecimientos.

Los activistas aseguran que fue atropellado por un coche policial y el incidente llevó a que decenas de jóvenes se concentrasen ayer frente a la sede del ministerio de Interior al grito de «Policía asesina, ministerio terrorista» y «no tenemos miedo, las calles volverán a hervir».

Otros enfrentamientos se produjeron en ciudades del sur del país, como Gafsa, capital minera, Kasserine, fronteriza con Argelia y feudo yihadista, y Sidi Bou Sid, origen de la revolución que en 2011 acabó con la dictadura de Zinedin el Abedin Ben Alí.

El ex presidente tunecino huyó a Arabia Saudita el 14 de enero de 2011, tras un mes de protestas ciudadanas, que supusieron, además, el inicio de la llamada «Primavera Árabe».