El ex ministro de Economía Axel Kicillof consideró hoy que la causa que investiga las operaciones de venta de dólar a futuro realizadas durante el año 2015 «es una vergüenza escandalosa» y sostuvo que «no existió delito», «no hay absolutamente nada», tras presentar un escrito ante el juez federal Claudio Bonadio en el marco de la indagatoria, en la cual no respondió preguntas.

A su vez, sostuvo que «en todo el expediente no se observa ningún delito, de nadie, ni del Banco Central ni del Poder Ejecutivo, y no hay ninguna acusación de corrupción», previo a leer ante la prensa el escrito que presentó ante el juez Claudio Bonadio en el marco de la causa que investiga irregularidades en la venta de dólar a futuro.

El ex ministro aseguró que en la causa que investiga operaciones de dólar a futuro «se está juzgando la política económica» del anterior gobierno, y reiteró que es una «denuncia política armada porque no existe acusación alguna».

Kicillof, quien llegó minutos antes de las 9.30 a los Tribunales Federales de Comodoro Py donde fue saludado por la titular de la Asociación de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, y los militantes kirchneristas que comenzaron a acampar en la afueras de Comodoro Py para esperar mañana la declaración de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en la misma causa judicial.

Estaban presentes en las escalinatas Mariano Recalde, Dady Brieva, Liliana Herrero, María José Lubertino, Gabriela Alegre, Eduardo «Wado» de Pedro y Andrés Larroque, entre otros referentes del kirchnerismo.

Antes de que llegara Kicillof, el ex titular de la AFSCA, Martín Sabbatella, afirmó que la causa en la que se investigan irregularidades en la venta de dólar a futuro es «una maniobra política» para «desgastar el proyecto nacional».

El dirigente de Nuevo Encuentro enfatizó que «le temen a la vigencia del kirchnerismo y de Cristina».

Sabbatella consideró que la corrupción es un problema «estructural» de todos los estamentos de la sociedad y señaló que «si alguien cometió un delito se tiene que investigar».

No obstante, estimó que «en este caso es una maniobra política de la derecha, del partido mediático y del partido judicial para lesionar nuestro proyecto y porque le temen al futuro».