El presidente Alberto Fernández advirtió este viernes que los acreedores privados «no pueden pretender cobrar como quieren», y consideró que el respaldo del FMI a la posición argentina, ayudará al Gobierno en las negociaciones con los bonistas.

«Con mucho cuidado tendremos que trabajar con los acreedores privados, que son otra cosa, es un juego difícil. Pero sabiendo ellos que hay un auditor, el FMI, que nos dijo que lo que sostenemos nosotros es verdad», sostuvo el jefe de Estado.

En declaraciones a la radio AM 750, Fernández señaló que los bonistas «no pueden pretender cobrar como pretenden», y graficó que con ellos, el Gobierno mantendrá «como un juego de póker. Y estamos para pelear. Pero estoy confiado y poco a poco vamos a ir ordenando la economía».

El Presidente insistió con que el FMI «dio un paso muy importante» al señalar que la deuda argentina «no es sostenible», pero aclaró: «no podemos ser exitistas».

«Es un paso único en la historia. Y ahora tengo la gran tranquilidad de que me dieran la razón. Nosotros queremos cumplir, pero no a costa de hacer sufrir a la gente», enfatizó.

Y añadió: «es un triunfo de la razón que por una vez no nos atemos a dogmatismos y miremos la realidad».

Fernández dijo ser «un gran racionalista y si uno persiste con la lógica, se pueden imponer los objetivos. Y creo que hemos logrado eso» con el Fondo Monetario.

En esa línea, indicó que ese organismo crediticio «es responsable del vaciamiento de reservas. Es algo que dije en campaña electoral, y me acusaban de ser populista, chavista y que íbamos a dejar a la Argentina fuera del mundo».

«Por eso, creo que, ahora, es muy valioso que el Fondo Monetario revise sus métodos, porque no ha resuelto los problemas de la deuda de muchos países. Me parece que ese organismo tiene una buena oportunidad para que haga esa revisión», enfatizó el jefe de Estado.

Jubilaciones de privilegio

Por otra parte, el presidente ratificó este viernes su intención de reformar el régimen especial de jubilación del Poder Judicial y subrayó que no es «una guerra santa» contra los jueces, pero se quejó de que los magistrados lo «amenacen» diciendo que van a declarar inconstitucional la norma.

«La Constitución dice que el Estado debe garantizarle la intangibilidad de los ingresos a los jueces, que hoy en día fijan sus propios sueldos y se fijaron sueldos interesantes. Pero la intangibilidad tiene que ver con los jueces que imparten justicia, que están en funciones», sostuvo el mandatario.

En declaracioens radiales, el jefe de Estado afirmó que «lo único» que plantea el Poder Ejecutivo con el proyecto enviado al Congreso es que las jubilaciones de los miembros de la Justicia «sigan la lógica de todo el mundo».

«El 82 por ciento móvil que cobran lo hacen sobre el bruto, por lo que en verdad cobran el 92 por ciento. No tengo un problema con los jueces, lo único que quiero es poner un poco de igualdad en el sistema que no es igualitario. No estamos planteando una guerra santa contra los jueces», remarcó.

Asimismo, rechazó las críticas y advertencias que hicieron distintos miembros del Poder Judicial, anticipando que si la iniciativa se convierte en ley, van a declararla inconstitucional.

«No me parece feliz que los jueces me amenacen diciendo `ya le aviso que si me tocan la jubilación, yo lo voy a declarar inconstitucional´«, concluyó Alberto Fernández.