Alberto Sileoni, titular del ministerio y diferentes gremios acodaron continuar las paritarias del sector, la inversión en recursos pedagógicos e infraestructura, los programas socioeducativos y la estabilidad de los trabajadores.
“Ratificamos junto a los gremios el escenario paritario como el único posible para la discusión salarial de los empleados de la educación”, destacó el titular de la cartera educativa nacional. En el encuentro participaron, además, el secretario de Educación de la Nación, Jaime Perczyk; el secretario general del Consejo Federal de Educación, Tomás Ibarra, y el subsecretario de Coordinación Administrativa del Ministerio, Daniel Iglesias.
Por los gremios docentes estuvieron la secretaria general de Ctera (Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina), Sonia Alesso; la secretaria general de Amet (Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica ), Sara García; el secretario general de CEA (Confederación de Educadores Argentinos), Fabián Felman; la secretaria adjunta de SADOP (Sindicato Argentino de Docentes Privados), María Lazzaro; y el secretario general de UTE (Unión Trabajadores de la Educación), Eduardo López.
El texto busca “garantizar y sostener, en acuerdo con todas las jurisdicciones, el incremento progresivo de la inversión educativa”; así como “las condiciones necesarias para el cumplimiento efectivo de la obligatoriedad escolar y del tiempo de aprendizaje alcanzando los 190 días de clase efectivos en todo el país”, indicó un comunicado del Ministerio de Educación.
Además propone la profundización de la inversión “en infraestructura, equipamientos y recursos tecnológicos y pedagógicos a fin de garantizar las condiciones materiales necesarias para los procesos de mejoramiento de la calidad de la educación”, y garantizar las acciones socioeducativas “que contribuyen a una educación integral y de calidad”.
Los gremios también pidieron preservar las condiciones de trabajo decente, las políticas nacionales de compensación salarial y las acciones llevadas adelante en el marco del Programa Nacional de Formación Permanente.
“La calidad educativa contiene a la inclusión social, al ejercicio de la ciudadanía y al respeto por los derechos humanos –sostiene la carta–, donde el Estado debe garantizar las condiciones materiales y culturales para que todos los estudiantes logren aprendizajes comunes de buena calidad, independientemente de su origen social, radicación geográfica, género o identidad cultural”.
Entre los avances producidos y las políticas implementadas en la educación pública nacional durante los últimos doce años; la declaración enumera la reconstrucción del sistema educativo argentino, el financiamiento sostenido equivalente a más del 6% del PBI; la recuperación del rol principal e indelegable del Estado en la educación; y la inclusión cientos de miles de alumnas y alumnos en el nivel inicial y en la educación secundaria, superior y universitaria.
El texto destaca la extensión de la obligatoriedad escolar de 10 a 14 años; la puesta en marcha de un proceso de formación docente permanente, gratuito y en servicio; la construcción del escenario paritario y la recuperación de la educación técnica; la distribución de más de 90 millones de libros y 5 millones de netbooks y la implementación de la Asignación Universal por Hijo.
