Desde los asesinatos de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán hasta el caso Pomar. Desde diciembre del 2001 hasta los asesinatos de de Rafael Nahuel y Santiago Maldonado, pasando por la presidencia de Adolfo Rodríguez Saá. Hechos distintos entre sí ocurridos en la Argentina del siglo XXI que ocasionaron un punto de inflexión en la gente, movilizando al pueblo y generando un sacudón en la opinión pública.

Diez crónicas sobre diez de esos hechos son las que Mario Wainfeld retrata en su libro “Estallidos Argentinos”, que su autor presentó este miércoles en la sede de Luz y Fuerza de Rosario (Paraguay 1135).

Reconstruyendo con pinceladas imperdibles acontecimientos de la calle y del Palacio –esa cápsula en la que se encierran los funcionarios–, el periodista y escritor compone un retrato revelador de la política criolla.

“Si en la Argentina –y el presente no nos desmiente– solemos sentir que todo tambalea, Estallidos argentinos nos trae las claves que necesitábamos para entender el buen y el mal gobierno y la vitalidad plebeya de nuestra sociedad”, reza en su sinópsis.

En diálogo con Conclusión, Wainfeld expuso los motivos por los que eligió cada una de las crónicas que componen su nuevo trabajo, donde interpela a través de la literatura algunos de los casos más resonantes de la historia moderna del país.

 

– ¿Qué se va a encontrar el lector en “Estallidos Argentinos”?

– Se va a encontrar, básicamente, con diez crónicas de la Argentina del siglo XXI. Diez hechos recientes, muy fuertes. No son todos estallidos en el sentido estricto, pero momentos de inflexión, tremendos y de encrucijada en la historia argentina del siglo XXI. Nueve son reales y uno lo inventé yo, es ficcional. Son episodios que van desde por ejemplo la presidencia de Adolfo Rodríguez Saá; los asesinatos de Kosteki y Santillán, Rafael Nahuel y Santiago Maldonado; el fallo de la Corte aplicando el 2×1 a represores y la reacción social; o el llamado caso Pomar. Son casos distintos. Cada crónica tiene un número redondo, veinte o veintipico de páginas. Las traté de relatar como un cuento, con muchos hechos. El problema, o la característica que tiene, es que como algún gran escritor dijo, “una crónica es un cuento que es verdad”. Quise hacer eso. No sé cómo me salió. Pero son hechos muy relevantes en la historia argentina, que muchas personas tal vez conocen, pero yo les prometo que tienen más material, más investigación, más análisis. O sea que, cuando lo lean van a encontrar cosas que sabían y cosas que no.

– ¿Cuál es el punto en común que tienen estos hechos que usted relata?

– Puntos de inflexión en la historia argentina, capacidad de movilización del pueblo argentino, violencia de las fuerzas de seguridad, disputa entre medios -algunos medios que defienden algunas políticas y tienen participación muy activa hasta que generan hechos y otros que se alinean de otra forma-, y muchos conflictos. La protesta social contra cierto poder de las instituciones, conflictos entre medios, conflictos de las fuerzas de seguridad con manifestantes, y sobre todo una capacidad de la Argentina de ser una sociedad muy vibrante, muy compleja, pero una sociedad en la que hay participación y resistencia.

– Se puede decir que cuando el pueblo argentino o el movimiento obrero no está de acuerdo con algo tiene fuerza y capacidad de movilización

– Tiene capacidad de salir a la calle, y por eso también hay tantas reacciones y por eso tiene relativamente tantos resultados y, dolorosamente, quienes pagan con su vida son militantes populares. En muchos casos, en movilización.