Ocurrió este lunes, en barrio Travesía. El presunto abusador, que vive en una casa lindera a la de la víctima, la engañó y la llevó a un descampado de la zona donde abusó de ella.
El acusado está imputado de abuso sexual con acceso carnal. Los abusos ocurrieron a lo largo de dos años, entre los 14 y los 16 de la víctima, con quien convivía.
Así lo adelantó la fiscal Alejandra Del Río Ayala en la audiencia preliminar que se realizó en los tribunales de capital provincial. El acusado tiene 32 años y las agresiones fueron cometidas mientras se desempeñaba como auxiliar preceptor de un hogar de niños en el que se alojaban las víctimas.
El juicio comienza este jueves en los Tribunales Provinciales de Santa Fe. Los crímenes fueron cometidos a lo largo de 5 años contra dos niñas menores de 13 años y el imputado será juzgado por abuso sexual con acceso carnal y corrupción de menores.
La Fiscalía y la Defensa llegaron a un acuerdo a través de un procedimiento abreviado por reiterados hechos ocurridos desde 2008 hasta 2013.
El caso fue juzgado en Rafaela y el acusado condenado a siete años de prisión, por violar a su sobrina de 11 años Sin embargo, un Tribunal de alzada desestimó la sentencia. Pero el fiscal del caso acudió a la Corte Suprema que ahora ordenó revocar esa última decisión y dictar nueva sentencia.
Así lo resolvió la jueza Patricia Bilotta en función de la acusación de la fiscal de la Unidad de Delitos Sexuales, Nora Marull.
El magistrado destacó que precisa saber "las circunstancias de realización del hecho y la extensión del daño en la víctima" por lo que "la calificación propuesta resulta errónea".
Tiene 42 años y está acusado de abusar de, al menos, cinco menores de edad, aunque se sospecha que hay muchas otras víctimas. Este domingo le dictaron la prisíon preventiva.
La medida cautelar fue dispuesta por el juez Gustavo Urdiales. El imputado tiene 40 años y sus iniciales son JEEA. El fiscal que investiga los hechos es Matías Broggi.
Los cinco jóvenes, conocidos como "la manada de Chubut", están imputados por violar grupalmente a una adolescente de 16 años en el 2012 pero no irán presos ya que el fiscal Fernando Rivarola disminuyó la calificación de la causa.
A los policías se los acusa de haber agredido, torturado y abusado sexualmente a miembros de la comunidad Qom de la localidad chaqueña de Fontana. "No vamos a tolerar que estos hechos pasen desapercibidos ni que vuelvan a ocurrir", expresaron desde el gobierno.