"Estamos dispuestos a trabajar con el presidente electo Alberto Fernández y su equipo cuando les parezca", dijo Gerry Rice, vocero del FMI, quien también aseguró no tener fecha de misión planificada.
El presidente estadounidense habló con el mandatario electo este viernes. “No dude en llamarme”, dijo el norteamericano al ex jefe de Gabinete.
La llegada del 10 de diciembre para algunos se está haciendo eterna. Los mercados financieros, por ejemplo, quieren saber con urgencia cuáles serán las políticas que adoptará el nuevo gobierno liderado por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner con crisis económica e inmensa deuda, y algunos banqueros ya han hasta amenazado con anticipación. Los fondos buitre aguardan y especulan.
“Esperamos colaborar con su administración para enfrentar los desafíos económicos de Argentina y promover un crecimiento inclusivo y sostenible que beneficie a todos los argentinos", dijo Kristalina Georgieva.
El informe sobre Estabilidad Financiera Global que recién publicó el Fondo Monetario Internacional (FMI) el 1º de octubre, tiene una advertencia muy alarmante:
El titular del Ministerio de Hacienda nacional apuntó que la inestabilidad económica es resultado de la incertidumbre política. "Una vez disuelta, no habrá excusa. Los números estarán claros", señaló.
En la tarde de este viernes se reunieron el ministro de Hacienda y el presidente del Banco Central Guido Sandleris con la directora del organismo, Kristalina Georgieva.
El Gobierno argentino y las autoridades del Fondo Monetario Internacional volverán a reunirse mañana en Washington, pero no habrá nuevo desembolso de divisas ni renegociación.
Al consultar en la web del BCRA, desde abril de 2018 hasta hoy, se observa claramente como se da por lapsos largos un goteo de reservas y en otros una salida brutal, luego recompuestas, en tramos, por el ingreso del préstamo stand by del organismo de crédito.
En conferencia de prensa, el ministro consideró que la Argentina "necesita recuperar el crédito voluntario".
El economista dijo que los acreedores "saben" la situación del país, por lo que se mostró optimista sobre el futuro reperfilamiento de la deuda para darle tiempo al país a que "construya capacidad de pago".
De acuerdo con la actualización de su informe de "Perspectivas Económicas Mundiales" (WEO, por su siglas en inglés), el organismo estimó el desequilibrio de la cuenta corriente de 1,2%.