Esta decisión es a pesar de la recomendación del Comité Conjunto de Vacunación e Inmunización británico (JCVI) de no administrar las vacunas contra el coronavirus de forma masiva para personas sanas de entre 12 y 15 años.
Ambos países se acusan de violar el derecho internacional y poner en peligro la vida de las personas. En lo que va del año más de 12.600 inmigrantes cruzaron el Canal de la Mancha en más de 500 embarcaciones.
Mientras la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen afirma que no reabrirá la negociación sobre ese país, el primer ministro británico, Boris Johnson insistió en que el bloque continental estudie "seriamente" su propuesta.
Tras el referéndum celebrado en 2016 hace cinco años, y que permitió la salida del Reino Unido de la UE, se introdujo el estatus de asentado para que los ciudadanos europeos que ya vivían en el país puedan seguir haciéndolo.
Una misteriosa falla al unísono en varios portales gubernamentales hicieron saltar las alarmas ante un posible ciberataque. Grandes medios de comunicación también estuvieron caídas.
Nicola Sturgeon consideró que "el futuro de Escocia debe ser la elección de Escocia" y afirmó que existe "un amplio consenso" de que hay que aspirar a "una sociedad más igualitaria, con una seguridad económica mucho mayor, y comprometido con un futuro sostenible para las generaciones venideras".
El ministro de Relaciones Exteriores británico, Dominic Raab estimó que “dado que las circunstancias y las amenazas cambian con el tiempo”, necesitan “mantener un nivel mínimo y creíble de disuasión".
El Gobierno de Boris Johnson determinó que desde el 8 de marzo se hará la reapertura de forma paulatina en los colegios y que se completará el 21 de junio. En una encuesta realizada a europeos el mes pasado, el 65 % dijo que tenía planes de viajar.
La noticia surge en medio de la disputa entre el Reino Unido y la Unión Europea (UE) por la escasez de dosis, luego que Bruselas acusara al fabricante AstraZeneca, uno de los mayores proveedores de la vacuna de Oxford, de incumplir los acuerdos de entrega.
La serie "The Crown" despertó algunas inquietudes en el gobierno británico, desde donde pidieron que Netflix aclare que se trata de hechos ficcionales. Sin embargo, la empresa respondió que no tiene planes de incluir una advertencia en el contenido.
Los manifestantes se concentraron en la Plaza Trafalgar, en el centro de la capital, con pancartas que decían "!No más encierros, no más encubrimientos, no más máscaras, no más mentiras!". Entre la multitud estaba el hermano del ex líder laborista Jeremy Corbyn.
El primer ministro Boris Johnson dijo que "el Reino Unido enfrenta un desastre médico y moral a menos que se tomen medidas duras ahora para detener la propagación del coronavirus". Mientras tanto, el Banco de Inglaterra anunció que inyectará 150.000 millones de libras esterlinas adicionales para incentivar la economía golpeada por la pandemia.