El 77% de las compañías del sector de "Textiles" argumentó que la disminución de la demanda derivada del aislamiento, fue la principal causa para producir en forma normal.
En el acumulado enero-julio de este año la producción industrial cayó 3,4% respecto a igual período de 2019.
Pasó un nuevo Día de la Industria, muy golpeada por dos años de brutal recesión y ahora hundida en el escenario de una pandemia que ha modificado estándares de producción y comercialización de materias primas. En el marco del debate por el modelo que viene, la visión de tres hombres relacionados a distintas ramas industriales.
Es el propósito del Gobierno, según lo anunció Kulfas a partir de cuatro paquetes de medidas. Incluyen nuevas líneas de financiamiento a tasas subsidiadas y un nuevo programa de desarrollo de proveedores.
La caída de julio contrasta con la que había registrado el sector los meses anteriores.
El intendente local, Fernando Espinoza, sostuvo que las reaperturas se logran gracias a la "responsabilidad y solidaridad" de todos los sectores económicos y los trabajadores.
Según la entidad, la progresiva habilitación de actividades en distintas jurisdicciones del país y el estricto cumplimiento de protocolos sanitarios en los establecimientos industriales, generó cierta recuperación de la industria durante junio.
El uso de la capacidad instalada en el sector fue del 53,3% durante el sexto mes del año -la cifra más alta desde que comenzó la pandemia- pero en la comparación interanual la actividad mostró una caída de 5,8 puntos.
Luego de la abrupta caída que la economía argentina viene arrastrando en los últimos meses a causa de la pandemia, desde el Ministerio de Desarrollo Productivo advirtieron una considerable mejora aparejada al aumento en la producción industrial y el consumo.
Además, desde la entidad impulsan la Federalización de la producción y el trabajo, cambiando el concepto de producción de productos primarios por un entretejido industrial, comercial y de servicios, agregando valor en origen.
En los primeros seis meses de un año complicado para la economía, la construcción cayó un 37,8% y la industria un 14,6%. Ambas actividades recibieron el golpe de la pandemia y en abril registraron descensos récords en sus operaciones.
Es inexorable el cambio de ciclo económico en el país. El modelo financiero que exacerbó y fundió Macri, pero que empezó antes, está totalmente agotado. Viene la producción y el trabajo. Campo y energía, dos sectores claves. La visión desde la Liga Bioenergética.